El informe incrementa la probabilidad de que el cambio climático sea fundamentalmente un problema de origen humano al 95%, con respecto al estudio anterior de 2007 que establecía una probabilidad del 90%. Además, los científicos de la ONU predicen un aumento de olas de calor, sequías, inundaciones e incrementos del nivel del mar si no se toman medidas eficaces para reducir las emisiones de los gases contaminantes que provocan el efecto invernadero.
En concreto, según los expertos del IPCC, el nivel del mar podría subir entre 26 y 82 centímetros a finales de siglo, una horquilla mayor que la apuntada en 2007, cuando se hablaba de una subida de entre 18 y 59 centímetros.
Incremento de temperatura
El informe considera que una reducción rápida de los gases de efecto invernadero ayudará al mundo a evitar lo peor del cambio climático, pero sin unas estrategias de mitigación agresivas, la temperatura global subirá y probablemente superará los 2ºC de aumento en 2100. Las proyecciones se basan en escenarios posibles que tienen que ver con lo que reducirán o no los distintos países. El escenario más optimista prevé que la temperatura de la Tierra sólo aumente 0,3°C y el más pesimista que suba hasta 4,8°, tomando como referencia las temperaturas medias desde 1986 y hasta 2005"Lo que hace este informe es revisar cuánto más se sabe sobre el cambio climático desde 2007. Ahora hay más evidencias y esas evidencias son más robustas, o el nivel de confianza que se les puede asignar en términos de probabilidad es mayor", asegura Fidel González Rouco, investigador del Instituto de Geociencias del CSIC y la Universidad Complutense de Madrid y uno de los tres científicos españoles que han participado en el informe del Primer Grupo de Trabajo (los resultados de los grupos II y III se presentarán en 2014).
El informe destaca además algunas conclusiones importantes que se extraen del análisis de casi 10.000 publicaciones científicas producidas en los últimos seis años: el aumento del nivel del mar se ha acelerado, la tasa de deshielo del Ártico se ha duplicado, los glaciares y los casquetes polares se funden a una velocidad mayor y los océanos se están acidificando.