Pio Baroja es poco conocido en Lima, sin embargo, varias de sus obras han llegado a mi ciudad, sobre todo a través de coleccionables como el que muestro arriba.
Sé bien que dentro del núcleo más significativo de la obra de Pío Baroja, se encuentra la trilogía titulada La raza, a la que pertenece La ciudad de la niebla (1909) junto con La dama errante y El árbol de la ciencia.
Confieso que el único libro de Baroja que llegó a mis manos fue La ciudad de la Niebla, que al momento de adquirirlo como parte de la colección de Club Bruguera, desconocía la obra del autor. Mea culpa tardía pero necesaria.
Al momento de tener el libro en mis manos concebí que evidentemente La ciudad de la Niebla debía ser Londres, y me motivó a leerlo el hecho que se ambiente a principios del siglo XX, en una percepción lejana para mí en ese momento.
Cuando leo la novela, poco a poco voy conociendo las experiencias del autor en su visita a Londres entre 1905 y 1906. Ahora sé que la trama de la obra es una continuación cronológica del primer libro de la trilogía, pero que se puede leer de forma individual, como así lo hice.
Lo que más me gustó del libro fue la descripción del ambiente social y climático de Londres, tradicionalmente gris y cubierto de una espesa niebla, en el cual varios refugiados políticos españoles hacen malabares para subsistir.
En este ambiente, aparece la protagonista de la novela, la española María Aracil, exiliada en Londres, víctima de la persecución contra su padre, el doctor Aracil, acusado de la conspiración para dar muerte a Alfonso XII en un atentado perpretado en España., en el cual participa un enamorado anarquista quien busca refugio en la casa de su amada.
María vive junto a su padre, hasta que el doctor se casa con la señora Rinaldi, una viuda estadounidense, con la cual se muda a ese país. María queda sola y desamparada en una Londres poco acogedora.
Pasado algún tiempo, cuando las persecuciones iban menguando, una decepcionada y frustada María vuelve a Madrid y acepta el pedido de casamiento de su primo Venancio, con lo cual logra olvidar el farsante amor que vivió en Londres y que fue causante de sus pesares.
María llegar a tener una vida tranquila y dichosa y concibe el anhelado hijo.
Tengo pendiente la lectura de los libros que completan la trilogía La Raza. Es una promesa a cumplir.