Tarde del sábado pasado: ¿dormir siesta o hacerme un bolso? ¿dormir siesta o hacerme un bolso? Y ganó la batalla la costura.
Así que descuarticé dos pantalones vaqueros que tenía reservados para ello en tiras de 10 cm, las uní como si de un log cabin improvisado se tratara, un cierre snap y poco más para mi nuevo bolso.
Mi intención era que me combinara bien con todo y que me resultara cómodo. Por eso copié la forma, tamaño y largo de asas de uno que he usado mucho este invierno, pero que ya da calor de solo verlo.
Como veis los dos lados son prácticamente iguales. Para el interior me he dado más libertad, pues no me condiciona con respecto a la ropa que lleve puesta. Le he dado la vuelta al bolso para que se vea bien.
Forro azul marino con lunares blancos y un bolsillo dividido en dos compartimentos con mi querida Caperucita.
Y por el otro lado un bolsillo más con la misma tela.
Hoy mismo lo he estrenado y efectivamente es lo que yo quería, pues la verdad es que a veces planificamos una cosa y luego no nos sale exactamente como queríamos.
Ah, la tarde la estiré y finalmente el sábado tuve una pequeña siesta. ¿Qué más se puede pedir?
Muchas gracias por vuestra compañía.