
Durante mucho tiempo, y cada vez que el tema sale a relucir, los programas independientes de videojuegos han protestado ante la criminalización de los videojuegos que llevan a cabo psicólogos y periodistas al culparlos de asesinatos, masacres e incluso violaciones. Además, también lamentan que no pueden dar una explicación razonable a ello porque no tienen a un “especialista” con ellos. Pues bien, después de pensarlo y de organizar mis conocimientos e ideas, creo haber encontrado una explicación social, psicológica y criminológica a este fenómeno. Pero antes de proceder a la explicación, debo introducir un concepto sociológico y uno criminológico: el cambio social y el control social.
A lo largo de la historia, la sociedad cambia. ¿Por qué? Es sencillo: porque cambian los valores. Cada generación se guía por unos valores recibidos de los padres y profesores que son posteriormente alterados por el individuo durante sus etapas de socialización junto a sus grupos de iguales, que transmitirán a su vez a la siguiente generación. Además, durante esta alteración de valores, los individuos producen feedback, es decir, mandan estos valores alterados de vuelta para que sean evaluados. Si estos valores se consideran correctos, se aceptarán. En caso contrario, serán corregidos y eliminados. Esto ultimo es lo que conocemos como control social. Además, cuando una minoría rechaza los nuevos valores y se niega a aceptarlos, hablamos de resistencia al cambio social.
Por tanto, podemos afirmar que tras ser educados por nuestros padres y profesores, nosotros les reeducamos como preparación para el cambio social.

Esto no es un adorno, eh.
¿Qué es lo que está ocurriendo actualmente? Los videojuegos están siendo ampliamente criminalizados, es decir, responsabilizados de los delitos que se llevan a cabo. Concretamente, muchos de Estados Unidos. Solo tenéis que ver que muchos casos vienen de Fox News (por ejemplo, el sexo no explícito de Mass Effect). Porque es un hecho que la libre posesión de armas que hay en Estados Unidos es la causa de su alto índice de criminalidad violenta y de la presencia de armas de fuego en delitos. Por ejemplo, la tasa de asesinatos en Nueva York es aproximadamente 5 veces mayor que la media europea.
Normalmente, preguntan a los psicólogos a raíz de que alguien haga esa conexión, lo que me lleva a hacer la siguiente pregunta: ¿Hasta que punto se han documentado? Y es que obviamente en unos días es imposible hacer una investigación, pero se puede consultar bibliografía ya existente. Y aun así, a la hora de hacer las selecciones, rápidamente podemos ver que en muchos casos los posicionamientos son en contra, a pesar de que hay bibliografía de ambos derivada de investigaciones muy buenas que han sido publicadas. De hecho, los estudios más recientes tienden a indicar que los videojuegos desestresan, no insensibilizan ante las imágenes violentas y mejoran nuestras aptitudes. Pero aún así, ¿como puede ser que esos expertos psicólogos generalicen tanto? Porque así de claro os lo digo: es de primero de carrera que en psicología no se generaliza, sino que se observan las diferencias individuales.

Sí, ciertamente esto te da ganas de ir a violar gente.
Entonces, ¿cuál es el problema? Que la libre posesión de armas es un pilar básico de la sociedad y cultura americanas, a la par que la culpable de gran parte de su delincuencia. Necesitan un objeto, algo inerte que culpar de la delincuencia. Los videojuegos. Ante la visión de un nuevo medio que mostraba imágenes violentas, decidieron escogerlos como cabeza de turco.
Además, aún habiendo como ya he dicho, investigaciones que dicen que los videojuegos son estimulo de la violencia y la agresividad, no parecen demostrar mucho esmero al culparlos. Se escudan en que no hay calificaciones, en que las imágenes que muestran perturban las mentes de los niños… cuando los videojuegos modernos van calificados y a veces censurados, traen un control parental que permite regular el acceso a algunos contenidos, y son los padres los que permiten que los hijos jueguen sin control ni medida. Usan estos argumentos para que los videojuegos parezcan culpables de todo, a sabiendas de que en entrevistas y/o debates cerrados nadie le llevará la contraria al especialista, al “psicólogo experto con chorrocientos años de experiencia”. Y aunque sea una idiotez, han sido capaces de decir que la acción “Gang Bang” de BulletStorm incita a violar.
¿Hay alguna solución? A parte de convencer a nuestros conocidos de esto para que sigan las calificaciones y vigilen a sus hijos, no. ¿Por qué? Ya lo he dicho, toda esta influencia viene de Estados Unidos, y a no ser que allí sufran un gran cambio de mentalidad o cambien el objeto de culpa, la cosa seguirá igual.
Primera colaboracion del oyente Colt92 en el blog.
