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Cadena SER: “La alegría de encontrar un empleo, aunque sea mal pagado” (6/11/2013)
La SER eligió el miércoles esta pieza para ilustrar los datos del paro de octubre, en que se registró un aumento de 87.000 personas. Una buena noticia según los analistas porque son 22.000 menos que las que se apuntaron a las listas en octubre del año pasado. Pero más allá de los números, lo que cuenta Ofelia, feliz por haber encontrado empleo cinco años después, en mi opinión refleja el triunfo indiscutible de la crisis y el éxito sin paliativos de la reforma laboral que el año pasado impuso el gobierno del PP a plena satisfacción de la patronal.
700 euros por un contrato temporal a jornada completa, incluyendo fines de semana, de los que despiden antes de las vacaciones y luego vuelven a contratar, si hay suerte. Una persona licenciada, que ha invertido buena parte de su vida en formarse con la esperanza de desarrollar su vida profesional en aquello que le apasiona, para lo que vale. Pues no, a limpiar y gracias porque con ese sueldo de mierda te vas a poder pagar la calefacción cinco años después.
Limpiar, recoger la basura, reponer en almacenes, barrer las calles, etc., son empleos tan dignos y necesarios como cualquier otro. Quienes ejercen esos trabajos para mí merecen tanto respeto como un neurocijano, un juez o un profesor universitario. Pero escuchar a Ofelia me produce una gran tristeza. Su caso es el ejemplo perfecto del fracaso de nuestra sociedad. Hay tantas Ofelias en este país que, lógicamente, tienen que agarrarse a lo que les caiga, porque lo primero es dar de comer a tus hijos, que hablar de recuperación es un insulto, una burla.
Ofelia ha olvidado sus sueños. Probablemente ha renunciado a la esperanza de sentirse realizada profesionalmente. Qué remedio. El dogma oficial ha triunfado. Nos conformamos; seguimos agachando la cabeza y aceptando las migajas que dejan caer quienes jamás en la vida olerán ni de lejos lo que significa no poder comprar carne para comer. Miles de personas ansían una “oportunidad” como la que ha encontrado Ofelia. ¿Derechos laborales? ¿Sueldo justo? ¿Vacaciones? Pretensiones de vagos que sólo quieren vivir del cuento.
Estudiar más allá de la enseñanza obligatoria es un lujo inútil para los pobres. Una pretensión absurda, porque hay que trabajar de lo que toca, no de lo que se quiere… a no ser que pertenezcas a una familia respetable, de las que tienen dinero por derecho “divino”. Mientras los pobres hemos olvidado qué significa la conciencia de clase, los que se siguen llenando los bolsillos mientras nos hacen ver que las ideologías son cosa del pasado hacen todo lo posible por blindar la frontera que les separa de la “chusma”, no se vayan a contagiar. La misma historia de siempre. El espejismo de la igualdad de oportunidades se ha desvanecido de forma cruel. Limpiar por 700 euros…
El próximo domingo ‘Salvados’ dedicará el programa al “precariado”, término muy acertado para definir a esa clase social mayoritaria, en la que me incluyo. Ya no somos proletarios porque hemos olvidado la reivindicación, la lucha, la convicción que llevó al proletariado genuino a conquistar los derechos sociales que se nos están escapando entre los dedos sin que seamos capaces de reaccionar. Al contrario, somos felices con un contrato temporal de mierda haciendo lo que sea.
Una última cosa. El gobierno valenciano ha decidido cerrar la radio y televisión públicas porque dice que no puede pagarlas. No voy a entrar en el debate de si los medios de comunicación públicos son necesarios (en mi opinión, son muy necesarios siempre y cuando puedan operar desde la independencia). El caso es que los trabajadores de Canal 9 han tomado el control de las emisiones y llevan varios días sacando a relucir toda la porquería que el gobierno autonómico del PP ha pretendido ocultar durante tantos años. Ahora, cuando ya no hay marcha atrás, cuando saben que se van a la calle sin remedio. Ahora recuperan la dignidad profesional. Ahora ejercen la labor para la que se supone que existe el periodismo. Una de sus caras visibles, la periodista Sònia Valiente, ha publicado en su perfil de Facebook una nota cuyo título, ‘Cobarde en Canal 9′, lo dice todo. Pide “disculpas de nuevo por tratar de pasar desapercibida en ese tiempo. Por tratar de conservar su empleo. Por haber tenido miedo. Por no haber sido PERIODISTA. Pensaba que ser valiente en Canal 9 salía caro y, miren ustedes por dónde, ser cobarde ha acabado saliendo carísimo. A todos los valencianos.”
La “crisis” ha vencido. Hemos fracasado.