Siglo XIX. Una joven aspirante a escritora queda prendada de un misterioso caballero inglés con el que se trasladará a una enorme pero ruinosa mansión en un pequeño condado de Inglaterra. Allí no tardará en darse cuenta de que su marido y la estricta hermana de él esconden numerosos secretos.
Tras los discretos resultados comerciales que cosechó Pacific Rim (2013), Guillermo del Toro vuelve a la carga explorando terrenos en los que se siente mucho más cómodo. El director mexicano ha creado para la ocasión un relato de terror gótico con regusto a clásico. Tras un tramo inicial que podríamos definir como costumbrista, pronto se va desvelando la tenebrosa naturaleza de un cuento adulto que cuenta con dosis de oscuridad y truculencia pero sin llegar a resultar molestas para un público mayoritario. Al tratarse de una especie de homenaje a las cintas de terror gótico que plagaban las carteleras en los años 50 y 60, la trama toma muchos elementos de dichas producciones, por lo que en ese sentido resulta poco original o novedosa.
Ahí precisamente comienzan los problemas que presenta la película, ya que todo resulta sumamente previsible y poco sorprendente. La atmósfera de terror, para los que estamos curtidos en el género, es demasiado liviana aunque reconozco que hay un par de momentos en el desenlace que no me esperaba. Además, hay un elemento que chirría especialmente, y son unos efectos digitales que me parecen poco apropiados para este tipo de historias, y en mi opinión esto le resta mucho de impacto a las secuencias en las que se utilizan.
Visualmente, La Cumbre Escarlata resulta primorosa. La producción artística brilla con luz propia y se convierte en la gran protagonista del filme, siendo el vestuario y los decorados una auténtica delicia para los ojos. Sin duda es lo más destacable de la película.
Los actores principales están bastante bien, destacando una Jessica Chastain que está empezando a cogerle el gusto a hacer papeles de malvada y, a mi parecer, lo borda. Tom Hiddlestone sigue bastante al alza con un papel diferente al Loki de Los Vengadores (2012) pero igualmente magnético. Junto a ellos, Mia Wasikowska me parece bastante sosa en esta película con una actuación muy plana. Completa el cuarteto Charlie Hunnam, el Jax Teller de Sons of Anarchy, que repite con Guillermo del Toro tras "Pacific Rim".
Por lo tanto, "La Cumbre Escarlata" se queda en una delicia visual y un correcto homenaje a un cine de terror añejo que ya no se hace, pero que se queda un pelín corta para los verdaderos amantes del género. Aún así, recomendable.
Mi nota: 6,5