Es una sensación que nunca se acaba. Es como si algo te acariciase la zona del corazón y, al mismo tiempo, es una sensación global. Es constante. Se mantiene ahí, suceda lo que suceda en el estado de vigilia, y provoca una división de la atención. Cuando estoy ocupada o con gente, puede sentirse como algo leve: una mera presencia. Pero cuando no tengo nada que hacer o cuando estoy sola y en silencio, se hace más fuerte y, cuando me relajo, se apodera completamente de mí. ~ Yolande Duran, El Silencio Sana <3
Ese espacio en el centro de tu pecho es donde el Amor habita en ti.
Ese espacio puede estar abierto o cerrado. Todo depende de ti. Tú tienes la llave.
Cuando lo mantienes cerrado puede que sientas un peso en el pecho, un dolor que suele venir acompañado de tristeza pues no puedes rechazar el Amor y ser feliz.
Cuando lo mantines abierto se siente como cosquillas, una suave brisa que te acaricia por dentro y te obliga a sonreír.
Lo mantienes abierto o cerrado dependiente del miedo que le tengas al Amor.
Y te aseguro que lo temes, aunque temer aquello que Eres sea cosa de locos.
Hoy vamos a permitir que ese espacio se abra y la conciencia del Amor sea restaurada.
Hoy vamos a permitir que el Amor nos alcance y nos acaricie el alma.
Es muy sencillo.
No tienes que hacer nada.
Simplemente abrirte a ese Amor al repetir internamente: " Siento el Amor de Dios dentro de mi ahora. Abro mi corazón al Amor. Hoy no le tendré miedo. "
Dilo con convicción pues el Amor está ahí esperando a que le des la bienvenida.
Permanece tranquila en la certeza de que tus deseos son órdenes.
Respira suavemente.
Y espera...
Sentirás un cosquilleo, como una suave brisa, un espacio abierto y ligero.
Permite que esas cosquillas te recuerden que eres amado pues el Amor habita en ti.
Y deja que la sensación se expanda y lo cubra todo y a todos.
¡Que bello es el mundo desde la perspectiva de un corazón abierto! ¡Un corazón que se regocija en dar y recibir!
No hay nadie a quien el Amor excluya. Todos son sus invitados en esta danza eterna.
La música sigue sonando.
Únete a ella.