Revista Religión
El origen de la devoción de la Divina Pastora en la población valenciana de Barx es aún poco preciso. La población durante la Edad Media hasta mediados del siglo XIX perteneció al Real Monasterio de Santa María de la Valldigna, monasterio cisterciense. En estas fechas contaba sólo con una pequeña capilla en la que cada semana se celebraba la Eucaristía.
Fue después de que el pueblo pasara a ser un municipio independiente en 1859, cuando el pueblo amplió la capilla, transformándola poco a poco en una iglesia de considerables dimensiones. Debió ser por esta época cuando se adquirió la imagen, aunque también cabe la posibilidad de que perteneciera al monasterio.
La talla escultórica de la Divina Pastora es una obra probablemente de finales del siglo XVIII o principios del XIX, atendiendo a sus características neoclásicas. No se conoce ningún documento que nos permita conocer su autor, al igual que no existe ningún estudio sobre el tema. Lo que es seguro es que se trata de una escultura de un imaginero valenciano.
El esquema compositivo sigue las siguientes características: la Virgen sentada en su regazo lleva al niño Jesús. Los dos llevan el atuendo típico de pastor con el sombrero. A su vez la Virgen lleva también el cayado pastoril. A su alrededor aparecen dos ovejas, una de ellas aparece recibiendo la atención del niño. Detrás se le coloca un árbol con unos pequeños frutos rojos. En ocasiones se le coloca uno natural con las mismas características, conocido como árbol de la Divina Pastora o Cerezo de Jerusalén (Solanum pseudocapsicum). Esto suele ocurrir el día de la celebración de las fiesta, en el que algún vecino del pueblo corta el arbusto para colocarla en la imagen.
Esta variante del tipo iconográfico es el que podemos encontrar habitualmente en las tierras valencianas. Un ejemplo es la Divina Pastora de los Padres Capuchinos de Bétera (Valencia) o la de los Padres Capuchinos de Alicante, además de la que se veneraba en la ciudad de Valencia.
La Divina Pastora en Barx tiene una gran importancia. Es la patrona del pueblo junto a san Miguel Arcángel. Las fiestas en su origen se celebraban durante los días próximos a la festividad de san Miguel, pero por causas de trabajo se tuvo que cambiar a la tercera semana de agosto. En los años 70-80 del siglo XX, en septiembre muchas personas tenían que ir a vendimiar a Francia, con lo que el pueblo quedaba vacío, por esta causa se cambió las fechas de las fiestas patronales, quedando definitivamente en agosto .
El día de la fiesta de la Divina Pastora se realizan diferentes actos religiosos. El día comienza con una despertada. A media mañana se celebra la misa y por la tarde-noche se realiza la procesión. En esta procesión salen los dos patrones del municipio, san Miguel Arcángel y la Divina Pastora. La imagen de San Miguel la llevan los hombres casados, mientras que la de la Divina Pastora los jóvenes. Es una procesión que discurre con multitud de fuegos de artificio. A la llegada a la calle que lleva su nombre hasta la iglesia, los portadores del anda la hacen bailar al son de la marcha de Ricardo Dorado Mater Mea. En estos momentos es cuando suelen darse los momentos más emotivos de la procesión, con los aplausos y gritos de la gente hacia la Divina Pastora. Al finalizar el recorrido ambas imágenes se bajan y se disparan unos cohetes, lanzados por varios vecinos.
Hace unos pocos años, en el año 2000 se creó en Barx una Hermandad dedicada a la Divina Pastora. Esta se encarga de organizar la fiesta de este día tan especial para los barxeros. Algunas veces, en el que hay festeros, se comparte con estos la organización de este día. También la hermandad organiza un viaje a las fiestas de la Divina Pastora de Cantillana.
En algunas ocasiones se han realizado también festividades especiales en honor a la Divina Pastora. Una de ellas se realizo en 1898, en acción de gracias a la Divina Pastora por los supervivientes de la Guerra de Cuba y en 1954 con motivo del Año Mariano, declarado en toda la Iglesia como centenario de la definición del dogma de la Inmaculada Concepción por Pío IX en 1854.
Leonardo Donet Donet.
Licenciado en Historia del arte.
Estudiante del Master de Historia del arte y Cultura Visual (UV).