Internet nos ha cambiado la vida, tanto de forma personal como profesional. Si echamos la vista hacia atrás nos daremos cuenta de la importancia que tiene las redes sociales en nuestras vidas.
La agilidad, inmediatez y acceso a la información en cualquier parte del mundo. Lo que antes costaba días, ahora se resuelve en cuestión de horas o minutos.
Uno de los aspectos que mas ha evolucionado es la relación empresa – cliente. Ya que puede conocer los gustos, y respuestas ante el producto o servicio.
Lo que no puedo entender es que una empresa decida crear una página en Facebook o Twitter o incluso en ambas o donde sea, y después no se actualice. O incluso que ni te conectas a la página para contestar a mirar posibles clientes que están interesados en tu producto o servicio.
Y no solo eso, hay quienes piensan que con una red social no se gana dinero, no sirve y que no interesa. He conocido gente de ese tipo, y se equivoca.
Por eso desde aquí hago un llamamiento:
Las redes sociales y los blogs se han convertido en elementos de comunicación bidireccionales que ponen en contacto a ambas partes revolucionando por completo el servicio de la atención al cliente. Y gracias a esas herramientas los clientes pueden hacer llegar sus dudas, comentarios, opiniones y sugerencias.
Por eso si lo que piensas es que una red social no te va dar la satisfacción económica que mereces es mejor que cierres tus páginas. Porque lo que se trata con las redes sociales es conocer y agradar siempre al cliente.