Un estudio de la Universidad de Texas A&M en College Station encontró que esta verdura puede inhibir el crecimiento de pólipos en personas con cáncer colorrectal ya sea genético o no.
La investigación evidencio cómo la verdura interactúo con las bacterias intestinales y la genética para reprimir el desarrollo de pólipos en ratas que tenían una forma inducida de cáncer similar al cáncer colorrectal no genético llamado poliposis adenomatosa familiar o esporádico de los humanos.
Para su estudio, los investigadores alimentaron con espinacas liofilizadas a ratas con poliposis adenomatosa familiar durante 26 semanas y luego utilizaron una metodología basada en datos llamada multi-ómicas que analiza datos de diferentes sistemas en el cuerpo, buscando asociaciones que puedan sugerir áreas potenciales de investigación. y por ello analizaron muestras de tres sistemas: El microbioma buscando microbios intestinales beneficiosos y dañinos. El transcriptoma que es la colección de ARN y ARNm que las células o los tejidos expresan y el metaboloma que expresa los metabolitos que las células producen durante la actividad metabólica
Los datos metabolómicos, reportaron que no había clorofila y que en realidad, eran los ácidos grasos y los derivados del ácido linoleico los que causaban los efectos beneficiosos .
Los investigadores destacan que no se debe esperar hasta que surjan pólipos para comenzar a comer espinaca ya que ofrece muchos beneficios para la salud en cualquier caso, ya que además contiene varios nutrientes que ayudan a proteger la salud del corazón, es una rica fuente de vitamina K1, que se ha demostrado que ayuda a reducir el riesgo de cardiomegalia. La espinaca es naturalmente rica en glutatión, que ayuda a impulsar la vía antioxidante principal en el cuerpo, ayudando a abordar el estrés oxidativo y respaldar la función inmunológica. La espinaca también contiene ácido fólico , que es una de las vitaminas necesarias para reducir los niveles de homocisteína en el cuerpo; reduciendo la placa en las arterias y los niveles de ácido úrico al inhibir la formación de purinas.
La ciencia actual sugiere que los alimentos y bebidas azucaradas promueven el cáncer, mientras que las frutas y verduras lo disminuyen.
El estudio aparece en la revista Gut Microbes.