Ya nos han distraído, nos han creado problemas y gradualmente nos han ido convenciendo del mundo que nos rodea. Y ahora: ¿se ponen de nuestro lado? ¿pero qué…? Bueno, todo tiene una explicación, ahí va la cuarta estrategia de manipulación: La estrategia de diferir.
Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.
Feliz fin de semana,
Salud!