Según explica D. Aurelio García López en su libro Tamajon en la Edad Moderna (siglos XVI a XIX), el Sr Cadot vendió la fábrica de vidrio en perfecto estado de funcionamiento, incluyendo maquinaria y útiles a D. Rafael Garreta, un industrial de Madrid, por 50.000.-reales. El Ayuntamiento aceptó el traspaso del arrendamiento bajo la condición que si la fábrica estaba parada 5 años, pasaría al pueblo.
El nuevo propietario instaló un tejar en las lagunas de Cantarranas (aún se ven sus ruinas junto al mirador), compró las besanas de los Arenales y el Arca del Convento, anexas a la fábrica así como los arenales de Sacedondillo. Retomó el proceso de fabricación en 1.829 con los oficiales ya contratados y aumentó la plantilla con un maestro tallador (Juan Boanal) y un aprendiz del pueblo.
Los productos fabricados en 1.830 podían comprarse en Hermanos Garreta en la calle Desengaño: vasos y floreros de cristal azulado, vasos de cuartillo lisos asiento grueso, de medio cuartillo y de copa, botellas para agua de 2,5 cuartillos. Rafael murió en 1.833 y su viuda continuó la actividad.Según la revista España, el 1 mayo 1.835 que sus productos se vendían en la Carrera de San Jerónimo y que la fábrica llevaba unos años cerrada. Hay constancia que en 1.845 fabricaba vidrio blanco y seguía en funcionamiento en 1.856 (había 28 fábricas en España). En 1.863 no figura y dos años después estaba en ruinas. Hoy parte de su interior ha sido reedificado como vivienda privada y su acceso está vedado.
Lar-ami
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