La gente siempre va a hablar, así que vamos a darles algo de qué hablar

En los últimos años escuché diferentes cosas acerca de los tatuajes, desde la perspectiva de los que están de acuerdo y de los que no. He escuchando algunos puntos de vista psicológicos, y otros de las personas mayores (como mi abuela o mi profesora de inglés, señoras que superan los 70 años) que poseen opiniones muy centradas en lo antiguo y tienen cierta repulsión contra los tatoo. Existen tantos puntos de vista, que tranquilamente podríamos hablar de ellos durante toda una tarde y sentir que el tiempo pasó volando. Vivimos en plena libertad de expresión y creo que es algo increíble, pero tampoco me parece adecuado que utilicen la explicación “psicológica” para decir que todos los casos de tatuajes, se tratan de que esa persona tiene algo que ocultar o porque no está conforme con su cuerpo… Creo que deberían hablar uno por uno con cada persona que decide hacerse un tatuaje para preguntar sus razones, sus por qué, sus todos y comprender que no tiene que ser un problema psicológico sino que son ciertos gustos que se generan, y que deberían ser respetados.
En mi caso, siempre paso muchos años pensando los tatuajes que me voy a hacer, ya que si esa idea perdura por varios años… ¿por qué no perduraría por muchos años más? Cuando en mayo del 2013 me hice el de Harry Potter, fue un alivio terrible. Desde que leí el séptimo libro que algo quería hacer con Las Reliquias de la muerte, y así fue como años después tuve el diseño completo y apenas pude me lo hice. Para mi cumpleaños 19 me regalaron un tatuaje a libre elección y fue como ¿OMG QUÉ CARAJOS ME HAGO? Yo ya tengo en mente una frase de mcr que hace mucho tiempo me quería hacer y que sigo con esa idea, por lo que seguramente más adelante lo haga. Sin embargo en esta ocasión pensé algo diferente: Batman. Yo tengo una cierta obsesión por Batman desde que tengo unos seis años, por lo que en todo ese tiempo en la cabeza se me vinieron mil y un tatuajes diferentes, predominando ciertas frases de las películas que para mi son gloriosas. Hasta que buscando fotos por internet encontré ciertos diseños tan lindos que hubo un momento que me sentí desbordada y ya no podía elegir entre tantas cosas que me gustaban. Tal vez este tatuaje tuvo un poquito más de impulso que el de Harry. ¿Me arrepiento? No, para nada, todo lo contrario, me sentí más rebelde de lo habitual. A lo Hermione cuando dice “Romper las reglas” en HP 5 y está feliz. Después de hacérmelo me puse a pensar que tal vez me hubiese quedado mejor en otro lado, pero me lo imaginé tantas veces ahí, que ahora creo que es un condimento perfecto en mi cuerpo. 
Yo soy de esas personas que no expresan arte en su cuerpo, porque no creo que mi cuerpo sea parte de una pieza de arte, lo qué sí creo es que yo busco plasmar en tinta cosas que me obsesionan y fascinan desde que soy chica, cosas que sé que me van a gustar, cosas que tienen un significado específico para mí, algo por lo que de verdad necesitaba tenerlos en mi cuerpo. Son significados que para otra persona les pueden parecer una idiotez, o que me podrían decir “bueno, podrías decir que sos fan de otra forma, como usando una remera”, pero así no se soluciona todo. Yo no digo que voy a llenarme el cuerpo de tatuajes, a lo sumo me haré uno más o tal vez ni me lo haga y quede como estoy, y sin embargo, no me sigue pareciendo mal querer darle más tinta a mi cuerpo o que otras personas lo hagan. No estoy de acuerdo cuando se hacen corazoncitos, signos de infinito y esas boludeces. Sí estoy de acuerdo cuando encuentran una razón válida para ustedes y que sea siempre lo suficiente para que no les cambie la cabeza nunca. Hay que tener en  mente de que las explicaciones las tenemos que aceptar nosotros, no el afuera. Nosotros somos los que tenemos la piel marcada. Nosotros somos lo que debemos estar seguros y no arrepentirnos. Lo que diga el resto… Pues la gente va a hablar siempre, ¿no? Y como digo mi madre monster, Lady Gaga:
"La gente siempre va a hablar, así que vamos a darles algo de qué hablar"