La 'impericia' del empresario Javier Conde

"Por la impericia de Javier Conde de cerrar una buena tarde en Málaga", dice Julián Guerra, apoderado del novillero malagueño Jiménez Fortes se ofreció a la empresa de Málaga para lidiar seis novillos en solitario o para participar en una mixta con figuras. "Pero Javier Conde rechaza las dos opciones"

Al parecer, Javier Conde limita la participación de Fortes en la novillada de La Quinta, en terna con otros novilleros. La solución "no solo es válida para nosotros", dice Julián Guerra, "sino que aceptamos, donamos los honorarios a la Escuela de Málaga, siempre y cuando atiendan la petición del novillero de matar además una mixta con figuras o seis novillos en solitario".

Conde aclara que la mixta está fuera de pliego, "pero hace tres o cuatro años sí la hicieron con Cayetano", matiza Guerra, y casi todos los años se anuncia una mixta con rejoneadores y matadores. (Como al parecer se viene apuntando va a acontecer en la próxima feria de agosto con Manzanares y su hermano).

Fuente: Burladero.com

Con estas cosas que están ocurriendo en la confección de la cartelería de la próxima feria de agosto de Málaga, se está perpetrando lo que algunos aficionados están denominando la “pucherada condista”. De ser todo esto cierto, y todas las informaciones que se están dando así parecen demostrarlo, los deseos de Javier Conde y su familia de optar en un futuro cercano, tanto a  encargarse de la Escuela Taurina de la Diputación como a ser la empresa concesionaria de la Malagueta, se están yendo al traste. Nadie podrá entender ni aceptar que actuando de esta forma, que al fin y a la postre va en contra de Málaga y su afición, el actual ente supramunicipal pueda ni siquiera pensar en ello. Dentro de muy poco veremos hacia que dirección van los nuevos aires de esta reciente Diputación cuando se le presenten los carteles y traguen con tanto despropósito o, por contra, decidan como así especifica el actual pliego de condiciones de la plaza del paseo de Reding requerir a la empresa para que la próxima feria de Málaga no siga abocada al desastre acostumbrado. La última palabra la tendrá la Diputación presidida por el presidente provincial del PP, Elías Bendodo. Aunque si tenemos que atenernos a su discurso de toma de posesión en el que no hay ni una frase, ni una palabra, ni sobre la fiesta de los toros ni sobre la joya monumental de la Diputación, la plaza de toros de la Malagueta, no abrigo esperanza alguna en que se acabe con el despropósito en materia taurina de esta ciudad, sino todo lo contrario. Quedan ya muy pocos días para comprobarlo.