La importancia de tener un buen colchón para dormir

¿Se ha puesto usted a pensar en la cantidad de tiempo que pasa cada día de su vida acostado en una cama?
La cama en que dormimos es una parte muy importante de nuestra vida. Mucho más importante de lo que podemos llegar a creer o imaginar. Pero, ¿cada cuánto tiempo usted se pregunta acerca de la importancia de tener una buena cama en dónde dormir? Por lo general, casi ninguna persona tiene en cuenta la importancia de contar con una cama adecuada, teniendo en cuenta que pasamos al menos la mitad de nuestra vida acostado en una de ellas.
Si tomamos en cuenta que todas las personas necesitamos descansar parea recuperar la energía de nuestro cuerpo, para poder desempeñarnos correctamente en nuestra vida, entonces comenzaremos a ver lo importante que es tener una buena cama, y más exactamente, lo importante que es contar con un muy buen colchón.
Cuando dormimos de forma inadecuada, disminuye nuestra productividad, nos hacemos irritables y eventualmente podemos llegar a enfermarnos de diabetes, sobrepeso, hipertensión arterial, etc. Aunque nadie le presta mucha atención a este tema, dormir bien es una buena forma de garantizar una buena salud.
Por lo general, los colchones viejos son responsables de muchas dolencias y enfermedades, que tienen su origen en la incapacidad de un colchón viejo, para ofrecernos la posibilidad de tener un verdadero sueño reparador.
A continuación encontrará algunas cosas que usted debería saber, sobre los problemas que pueden llegar a nuestra vida con el envejecimiento del colchón sobre el cual dormimos.
Un colchón viejo es caldo de cultivo perfecto para los alérgenos
Los colchones más viejos tienden a cambiar de color y a menudo se tornan malolientes, aunque debido a la costumbre, pocas veces nos damos cuenta de ese mal olor.
Generalmente, el cambio en el color de un colchón y su mal olor, son ocasionados por las escamas microscópicas de piel muerta que a cada instante se están desprendiendo de nuestro cuerpo, el sudor, y los ácaros que viven por miles de millones en nuestros colchones sin que siquiera nos percatemos de su presencia.

Estos minúsculos animales, ponen millones de huevos, viven y excretan entre las fibras de nuestros colchones y nos acompañan durante todo el tiempo de existencia de ese colchón. La piel muerta que desprendemos, el sudor de nuestro cuerpo, las excreciones de los ácaros, más los ácaros que a diario mueren, son los encargados de descomponerse y de liberar vapores desagradables que le dan el mal olor a nuestros colchones.
Un colchón viejo que sufre de todo lo anterior, es lo que contribuye a la mala calidad del sueño, debido a que permanentemente estamos inhalando esos alérgenos microscópicos que desencadenan reacciones alérgicas, tos o sibilancias, estornudos o senos paranasales congestionados, asma, etc.
Las necesidades de su cuerpo cambian con el tiempo, así como cambia la forma de su colchón
Pasados los años, los colchones comienzan a perder su capacidad para sostener adecuadamente el cuerpo. Además, a medida que envejecemos, nuestro peso corporal cambia, nuestra forma corporal cambia, y de igual manera, cambia la forma del colchón sobre el cual dormimos. Un colchón inadecuado, que no soporta nuestro cuerpo de manera correcta, puede causar molestias a la hora de dormir y pérdida de sueño, lo que de igual forma nos hará despertar cada mañana agotados y adoloridos en lugar de permitirnos despertar descansados y plenos de energía.
Es muy importante asegurarse de que su colchón es el colchón adecuado para las necesidades de su cuerpo. Un buen colchón le hará sentirse fresco y relajado cada mañana al despertar. Si esto no se cumple para usted, es hora de comenzar a pensar seriamente en comprar un nuevo colchón.
La almohada también es muy importante
Un detalle que a menudo se pasa por alto a la hora de dormir, es la calidad de nuestra almohada. Al igual que el colchón, una buena almohada es vital para lograr tener un buen descanso. La verdad es que, si su almohada no soporta su cabeza y cuello de una manera correcta, esto sin lugar a dudas, le generará enormes molestias cada vez que despierte, luego de haber dormido.
Comprar una almohada de calidad que se adapte a su posición para dormir, ya sea boca arriba, de lado o boca abajo, es una inversión que usted hace en la calidad de su sueño y cuando usted mejora la calidad de su sueño, mejora también su calidad de vida.
Existe una gran variedad de almohadas diseñadas para toda clase de personas. Es importante saber elegir bien, sobre todo una almohada que sea diseñada por ortopedistas, especializados en la forma del cuerpo humano.
Recuerde siempre que el buen dormir, es parte fundamental del buen vivir. Todo el dinero que usted invierta en mejorar las condiciones en las que duerme, le será retribuido por la vida a medida que vayan pasando los años.