No estamos muertos, estamos de parranda. En realidad, no, sino que (y creo que hablo por todos los que escribíamos en el blog) nos hemos vuelto mayores y las responsabilidades hacen que eso de escribir en un blog como afición tenga que ser una cosa secundaria (demasiado secundaria, que hace más de medio año que nadie publica nada). ¿Habrá que aprovechar estos días de encierro en nuestras casas para volver?
Después de más de un año sin pasarme por aquí, un lector me ha pedido mi opinión sobre la temporada 4 de Blindspot, así como había venido haciendo con la tercera y anteriores, así que voy a intentar hacerlo lo mejor que pueda después de haber acabado de verla hace meses y aún a la espera de una quinta (y última) temporada que todavía no tiene fecha de estreno. He tenido que revisar un poco lo acontecido en esta temporada porque no la tenía del todo presente, pero allá voy.
Lo cierto es que cuando acabé la cuarta temporada de Blindspot, me planteé escribir sobre ella. Sin embargo, como no fue para mí la mejor de las temporadas, no tuve la inspiración suficiente para ponerme a ello y al final la idea de comentarla se fue disipando y se olvidó. Aunque con un final de temporada de dos horas que probablemente nos dejó a todos al borde de los asientos y algo boquiabiertos, la temporada en general y los arcos argumentales que tuvo, no se pueden considerar entre los mejores de la serie. Para mí, quizás la temporada más floja de las cuatro.
El regreso de RemiLa temporada comenzó con lo que nos podíamos esperar después del final de la tercera temporada. Jane, ya no era más Jane, sino que Remi había vuelto. Este hecho supuso una problemática para el personaje, que tuvo que seguir fingiendo durante capítulos que era la modélica agente del FBI que llevaba años siendo y que no odiaba con todo su ser a Weller como Remi sí hacía, mientras luchaba contra alucinaciones con su hermano y con la imposible idea de encontrar a Shepherd y resucitar Sandstorm. Por un lado, me siento triste de que Roman fuera solo una alucinación y no hubiera sobrevivido, porque de verdad que su papel en la serie y la relación que tenía con Jane me gustaban muchísimo. Por otro lado, un aplauso a Jaimie Alexander, quien salta de un papel a otro constantemente de forma brillante durante varios capítulos hasta que la situación es totalmente insostenible y Weller hace caer a Remi.
Una cura milagrosaObviamente, Weller no quiere acabar con el cuerpo que contiene en algún rincón a su mujer. Jane tenía que estar en alguna parte oculta por el fantasma de Remi y por la intoxicación inexplicable que lleva dentro por culpa del ZIP, y nuevas técnicas experimentales propias de la ciencia ficción, consiguieron finalmente desenterrarla y despedir a Remi de una vez por todas. Aunque, como he dicho, el papel que hace Jaimie Alexander en estos capítulos en los que alterna a Remi con Jane son muy buenos, lo cierto es que me pareció que en cierta forma fue muy fácil para Kurt y el FBI acabar con Remi. Me parecieron pocos capítulos para desarrollar ese arco y una forma muy sencilla de arreglar el problema con una máquina milagrosa.
No acabaron los problemas ahí, claro está, y es que, aunque Remi se hubiera ido, Jane seguía enferma, y la enfermedad avanzaba a tal ritmo que se hizo prioritario encontrar la cura. Cuanto menos curioso fue el capítulo en el que Patterson y Rich fueron hasta Perú gracias a las pista de Roman en busca de unas células madre que quitarían todos los males a Jane como si de magia se tratara. Desde el punto de vista científico, me parece cuanto menos cuestionable esa cura, pero aceptaremos que El libro de los secretos nos haya devuelto a la Jane que conocíamos.
Los villanos y los olvidadosNo quiero hablar todo el tiempo de Jane y Weller, que, aunque protagonistas, no son los únicos importantes en la serie. Tras de ellos hay un montón más de personajes que, permitidme que os diga, esta temporada tuvieron un desarrollo un poco pobre en comparación, y que merecen también su mención en esta crítica.
En primer lugar, quisiera hablar de Madeline, la nueva villana a la que se han tenido que enfrentar: una señora que debería estar jubilada mirando telenovelas y que sorprendentemente está intentando tirar por los suelos un país. La relación con Zapata y la extorsión a la que la sometió durante toda la temporada me cansaron bastante y creo que la convierten en la peor enemiga de la serie. No obstante, Zapata ha pasado de parecerme un personaje mediocre a parecerme interesante y es algo que les aplaudo.
En prácticamente cada entrada que he escrito sobre Blindspot en este blog he dedicado alguna línea a mi dúo favorito de esta serie: Patterson y Rich. Ellos siempre aportan buena comedia y tramas interesantes y alocadas para entretenernos, y cada vez me gusta más el tándem que hacen, aunque se olviden de hacerlos un poco felices de vez en cuando. Realmente, el viaje a Perú en busca de la cura de Jane creo que fue uno de los mejores momentos de la temporada y las pinceladas de avance en sus vidas: la relación de Rich y Boston, o el nuevo interés de Patterson por los niños, son muy de agradecer.
También lo he mencionado en varias ocasiones, pero estoy (y sigo estando) totalmente en contra de la relación entre Zapata y Reade. Lo de convertir en romance metido con calzador cada una de las relaciones de amistad entre un hombre y una mujer en las series es algo que me gustaría mucho que a los guionistas se les quitara de la cabeza. No quiero hacer más comentarios al respecto porque lo cierto es que el tira y afloja de estos dos me tiene aburrida.
Finalmente, hablaré de los olvidados de esta temporada que han sido Blake, a quien le sacaron menos partido que a una servilleta desechable y de Avery, la hija desaparecida y vuelta a desaparecer de Jane. Simplemente quisiera comentar lo absurdo que me parece introducir personajes de gran relevancia en las vidas de los protagonistas para que luego no vuelvan a aparecer o no vuelva a hacerse mención siquiera de su existencia.
Quizás no sea esta la crítica más completa de la cuarta temporada de Blindspot que podáis encontrar. Perdonad si me olvido de aspectos importantes. Os invito a que comentéis aquello que me haya olvidado, o lo que os apetezca. Espero que no pase tanto tiempo hasta la próxima y que la quinta temporada les dé a los personajes los finales que merezcan. Al fin y al cabo, su creador ha obtenido justo las temporadas que quería para desarrollar su idea y conseguir más de 100 capítulos.
Doralicia (@Doralais)