Revista Cultura y Ocio

La influencia de Internet en nuestras vidas

Por Lola2011
La influencia de Internet en nuestras vidas
Hoy os quiero comentar una conferencia a la que asistí ayer, impartida por Franco Berardi e Ingrid Guardiola, que me impactó  y me dio qué pensar.
Y aunque no se trate de un tema estrictamente literario, hay que reconocer que Internet ha influido mucho en los escritores de hoy, tanto a nivel de promoción como de la facilidad que nos ofrece para publicar nuestras obras.
Pero no vamos a hablar de escritores sino de la influencia que tiene Internet en la vida de todos los que lo utilizamos.
Voy a comentar de forma muy resumida (para no aburriros), algunos puntos que se tocaron en la conferencia y ahí lo dejaré, para que cada uno le dé al "coco" y saque sus propias conclusiones.
Capitalismo psíquico: se refiere a la acumulación de datos personales por parte de los gigantes de Internet que les permiten manipularnos en todos los sentidos, ya sea político, social, económico, incluso moldear nuestro pensamiento y sentimientos (tremendo, ¿no?).
La soledad del ermitaño hiperconectado: el título ya lo dice todo...
La influencia de Internet en nuestras vidas
Performance: es la "película" que nos montamos para "vender" a los demás, que muchas veces, poco tiene que ver con nuestra propia realidad.
Voyerismo: es un instinto que tenemos todos. ¿A quién no le gusta meter las narices en la vida de otros? Y eso nos produce una satisfacción, claro.
la opacidad de la transparencia: parece una incongruencia, pero es cierto que cuanto más  nos abrimos (aparentemente), más opacos resultamos porque no ofrecemos una imagen real sino la que queremos transmitir.
Gratificación: los likes son el opio de los internautas. Y está demostrado que recibirlos o no tiene uno efecto en nuestros neurotransmisores (dopamina, serotonina, etc), y por tanto, en nuestra felicidad o desdicha.
La influencia de Internet en nuestras vidasAutogratificación y ser cuantificado: a todos nos gusta ser reconocidos y valorados por los demás. Todos y cada uno de nosotros nos sentimos el ombligo del mundo en las redes sociales.
El cuerpo postproducido: damos una imagen tan ficticia en Internet que nos disgregamos de nosotros mismos y luego nos esforzamos por convertirnos en ese "yo" que hemos creado. (¡Alucinante!)
La soledad: nos aislamos del mundo precisamente para estar conectados a él. Nos creamos nuestra propia prisión. Es una soledad autoimpuesta.
La cultura del odio: tras la pantalla parece que todos somos jueces, lo sabemos todo, dominamos todas las materias y estamos en posesión de la verdad absoluta. Por eso nos permitimos criticar sin piedad, juzgar, castigar, incluso unirnos en masa para hundir a otro. Creo que de ese modo (y esto es de mi cosecha) damos rienda suelta a nuestras frustraciones, nuestros fracasos y nuestros miedos.
En definitiva, la gratificación que nos produce Internet, y en particular las redes sociales, nos ha convertido en adictos y seres altamente manipulables.
Es para pensar en ello ¿no?


Volver a la Portada de Logo Paperblog