La Jaula de los tres grillos; No solo de lechuga se vive

Hace mucho tiempo que tenia apuntado en mi chigreagenda una visita a este peculiar establecimiento gijonés, situado en la calle Marque de San Esteban a la altura, casi de los Jardines de la Reina, muy cerca del puerto deportivo de Gijón, y llamado La Jaula de los 3 grillos.

Resulta complejo clasificar este local, por lo que me remito a otros que lo hicieron con gran acierto, en este caso en su articulo del diario El Comercio del tres de enero de 2019, el periodista Luis Antonio Alías1, y dice así:

"Mesas altas en el piso bajo, mesas bajas en el piso alto, cestos, calderos, tapetes, floripondios, barriles, botelleros, bicicletas, bandurrias, muñecos, madreñas gigantes, fotos de comensales amigos y de amigos comensales -uno conlleva lo otro- distribuidas ordenadamente por gradas y tarimas, cuadros del susodicho y otras fantasías heterogéneas redondean este sitio subtitulado 'casa de comidas y pública de conversación"

Creo que en estas líneas se sintetiza claramente lo llamativo de este restaurante y el espíritu que lo acompaña. Manteles coloristas, tapetes de ganchillo, vajilla viejuna y cachivaches por doquier.

Te atiende Javier Gallinota, al cual se le ve una sonrisa detrás de la mascarilla, algo que creo, todos, hemos aprendido a ver si ver, en este ya, largo año. Nos acomodamos en una mesa alta del piso bajo, pero cómoda, y optamos por cuatro raciones para compartir.

Empezamos con una ensalada Txecorra con ventrisca, que incluye tomate, queso, aguacate, pepinillo y cebolletas, muy rica y fresca. Seguimos con unos deliciosos calamares fritos Olympia y con unos Torreznos con huevos rotos y patatas. Creo que la descripción es más que suficiente para hacer volar tus papilas gustativas. Por ultimo el plato que más me gusto, la tortilla de sardinillas Adelita, premiada con el tercer premio en el campeonato internacional de tortillas de Arroes en 2019 y finalista en el campeonato de tortillas de Gijon 2018. Primero; no recuerdo los años que no probaba una tortilla de sardinillas, alegría. Segundo; es un verdadero espectáculo, sabor jugoso, con su cebolla pochada, con ese punto sin cuajar...deliciosa, y acompañada de tomate natural aliñado. Para beber un cava brut Marques de Cáceres muy bueno. Un buen pan, que eso siempre marca el nivel, que con café y copa no llegó a 40 € por cabeza.

Buenas raciones, muy buena atención y un sitio precioso, que invita a relajarse y charlar animadamente ajenos a las prisas del tiempo. Sin lugar a duda una jaula en la que encerrarse a gusto.