Note: There is a rating embedded within this post, please visit this post to rate it.
En este film seguimos la historia de Juan, Sara y Samuel (Brandon López, Karen Martínez y Carlos Chajón). Son tres adolescentes que viven -o, mejor dicho, sobreviven- en los suburbios de Guatemala. Deciden viajar a los Estados Unidos con la esperanza de encontrar una luz al final del túnel. Cuando atraviesan México, conocen a Chauk (Rodolfo Domínguez), un indígena de Chiapas que no sabe hablar español. Sin embargo, se une a ellos a bordo de un tren que parece que va a descarrilar en cualquier momento. Muy pronto, los cuatro aventureros se encontrarán con la cruda realidad.
Calificación: 7,364.
Ficha:
Título Original: La jaula de oro.
Director: Diego Quemada-Díez.
Guionistas: Lucía Carreras, Gibrán Portela, Diego Quemada-Díez.
Intérpretes: Brandon López, Rodolfo Domínguez, Karen Martínez, Carlos Chajón, Héctor Tahuite, Ricardo Esquerra, Luis Alberti, César Bañuelos, Gilberto Barraza, Juan Carlos Medellin, Salvador Ramírez Jiménez, José Concepción Macías, Ramon Medina.
Productores: Edher Campos, Inna Payán, Luis Salinas.
Fotografía: María Secco.
Música: Leonardo Heiblum, Jacobo Lieberman.
Montaje: Paloma López.
Diseño de Producción: Carlos Y. Jaques.
Diseño de Vestuario: Nohemi González.
Países: Guatemala, España, México.
Lugares de Rodaje: Guatemala, México.
Fechas de Rodaje: De 24-06-2012 a 11-01-2013.
Año: 2013.
Duración: 110 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 12 años.
Género: Drama.
Estreno: 05-12-2013.
Distribuidora: Golem Distribución, S. L.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España, Sitio Oficial.
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.
Crítica:
10-12-2013 – JOSU EGUREN
Príncipes del sur
En plena vorágine prenavideña, época en la que todos los medios especializados se afanan por abrumarnos con sus listas de las mejores películas de un año en el que los títulos más prometedores no llegarán hasta pasado el fin de curso, llama la atención la escasa repercusión del estreno de “La jaula de oro”, el primer largometraje del camarógrafo Diego Quemada-Díez. Una película notable que recuerda la odisea ferroviaria de los “Sin Nombre”, de Cary Fukunaga, y desde la que es fácil forzar analogías nostálgicas con “El emperador del norte”, de Robert Aldrich.
“La jaula de oro” impresiona por varios motivos, pero si hay uno que destaca es el titánico esfuerzo del modesto equipo de producción que ha hecho posible el rodaje de escenas de masas con resultados extraordinariamente verosímiles. Y ojo, porque estamos hablando de una película en la que tres actores no profesionales se infiltran en la marea humana de emigrantes que escapan de la miseria centroamericana para poner rumbo a Estados Unidos. Ya no se trata de espaldas mojadas, hablamos de miles de expatriados que parten desde Nicaragua, Honduras y Guatemala para recorrer los dos mundos que los separan de un trabajo basura.
Quemada-Díez concentra la mirada en tres personajes, dos adolescentes y un indio guatemalteco que terminan formando una extraña familia en contra de las adversidades que acechan un viaje lleno de peligros. En sus ojos no asoma el victimismo, a pesar de que enfrentan una realidad que les golpea con una crueldad indigna, lo que termina por cristalizar en una extraña y conmovedora forma de pureza que evoca las sensaciones que removía la Gelsomina del Fellini neorrealista. En su última fase, la que nos sitúa en una frontera que hace realidad las pesadillas distópicas de la fantaficción escrita desde el primer mundo, Quemada-Díez inserta un plano dudoso que pone rostro a un discurso implacable con las desigualdades que genera el monstruo capitalista.