Antes de desarrollar el tema "la levadura de cerveza para el acné" es oportuno recordar que originalmente era extraída como un subproducto de la cerveza y que a pesar de su procedencia carece de alcohol. Además según los documentos brindados por la farmacopea, su elaboración históricamente tuvo la finalidad de ser un aporte para la alimentación: la levadura de cerveza se usa para fermentar la malta y producir cerveza. El que consigue este prodigio es el microorganismo Saccharomyces cerevisiae..

Por su composición química la levadura de cerveza tiene un amplio espectro de acciones estimulantes para la salud humana, debido que por su alto tenor de proteínas, brinda los aminoácidos esenciales necesarios para dietas adelgazantes. También incluye vitaminas hidro y liposolubles, especialmente las de complejo B, por lo cual es un complemento ideal para el tratamientos de individuos con déficit vitamínico, según acuerdo con University of Maryland Medical Center.
Actúa en el metabolismo, regulando los niveles de colesterolemia, especialmente de HDL y LDL. Lo importante, además de las acciones mencionadas, es que sus principios activos revitalizan el cabello, la piel y las uñas, siendo elegido como uno de los tratamientos naturales más efectivos para el acné gracias a su efecto depurador en la piel y a su alto contenido de zinc que regula los cambios hormonales importantes.
También la levadura de cerveza es rica en cromo, que es un mineral útil para mantener los niveles normales de azúcar en la sangre. También tiene selenio, que ayuda al cuerpo a producir algunas proteínas llamadas enzimas antioxidantes que ayudan a prevenir el daño celular.
Recomendamos la ingesta de levadura de cerveza con moderación pues su exceso lleva a la proliferación de hongos, dando lugar a la aparición de la cándida. Las personas que tienen diabetes necesitan supervisión médica, puesto que la levadura de cerveza puede interactuar con los medicamentos para la diabetes, y causar hipoglucemia. Los efectos secundarios más frecuentes son gases. Para nuestro enunciado os proponemos un remedio eficaz aplicando una mascarilla natural sobre en la piel; y como siempre recordamos que todo lo natural tiene un proceso; siempre que seamos perseverantes y pacientes podremos observar los resultados entre dos y cuatro semanas.
Mascarillas con levaduras
Levadura de cerveza y agua caliente: aconsejada para los puntos negros o el acné incipiente de la adolescencia es prepararla con levadura de cerveza en polvo y agua caliente (previamente hervida). Una vez entibiada la preparación (de consistencia pastosa) se la extiende por la superficie de la cara, cuidando de no invadir la zona de los ojos. Se deja aplicada durante 20 minutos y después se retira utilizando sólo agua tibia. Al terminar de eliminar todos los residuos de la mascarilla, se lava la piel con agua fría, para cerrar lo poros de la piel. En los casos de pieles mixtas o pieles gasas se recomienda hidratar la zona con una crema hidratante.
Levadura de cerveza y leche descremada : Se recomienda esta mascarilla para el acné con espinillas. Se requiere de levadura de cerveza en polvo que se diluye enleche descremada hasta lograr una pasta que no sea muy espesa. Forma de aplicación: se extiende el producto sobre la superficie de la cara y se la deja actuar durante 15 minutos. Después se debe eliminar los residuos con agua tibia abundante.
Levadura de cerveza, leche y vinagre : Mascarilla en general para el cuerpo a base de leche. vinagre, yema de huevo y miel. Hay que disolver los ingredientes en leche tibia hasta conseguir una textura fácil de extender en la piel, sobre todo cuello, espalda, dejando actuar durante unos veinte minutos para enjuagar con agua tibia.
Estos tratamientos conviene repetirlos unas tres veces a la semana, pudiendo elaborar una cantidad que guardaremos en el frigorífico para su conservación..
En el primer siglo AD, se dice que el primer pan fue elaborado en la Galia y en la península Ibérica utilizando espuma de cerveza; es decir, lo que se forma en la parte superior de la bebida durante su fermentación. Este método sirvió para acelerar la fermentación y mejorar el sabor del pan y la forma en que crecía.