La llegada de los alemanes a Roma

1. Si uno desea considerar las relaciones germano-romanas a gran escala, en realidad hubo cuatro "invasiones" alemanas del imperio.

Alrededor del año 70 DC, los romanos habían fijado sus fronteras a lo largo de los ríos Rin y Danubio, y la fabricación había surgido allí para abastecer a las guarniciones. Un comercio constante con los alemanes creció y continuó durante todo el período imperial. El silver solidus romano se convirtió en la moneda estándar tanto para los romanos de la frontera como para los alemanes más allá de la frontera, y cada grupo influyó en el otro de diversas y significativas maneras.

Parte de las reformas de Diocleciano y Constantino que comenzaron en 285 fue la disminución de las legiones fronterizas y la formación de ejércitos móviles de tropas contratadas, principalmente alemanes, estacionados en el interior. Más económica que el sistema de defensa de la frontera, al disminuir la presencia romana en los distritos fronterizos, esta política debilitó las influencias romanas más allá de las fronteras imperiales en Occidente y fortaleció las influencias germánicas en el interior del imperio.

C. Inmigración patrocinada por el imperio

Desde aproximadamente 350 en adelante, el imperio occidental sufrió una escasez de mano de obra, en gran parte debido a la disminución de la población nativa, junto con la incapacidad de librar guerras exitosas con el fin de capturar a los prisioneros para esclavizarlos. El gobierno patrocinó varios tipos de inmigración para compensar esta escasez y, bajo estas políticas, muchos alemanes ingresaron al imperio de manera permanente.

(pronunciado LAY-tee) A los extranjeros se les permitió entrar en forma individual o familiar y se les asignaron tierras vacías. Se esperaba que realizaran el servicio militar cuando se les pidió que lo hicieran. Tenga en cuenta que la práctica de ofrecer una concesión de tierra a cambio de servicio militar se convertiría en una característica básica de la Europa medieval.

(pronunciado NOO-mehr-ee) Los contingentes guerreros extranjeros contratados por los romanos, a los numeri se les permitió luchar con sus propias armas bajo sus propios líderes y conservar su propio idioma y costumbres. Tenga en cuenta el uso de bandas de guerra germánicas.

(pronunciado fehd-uhr-AH-tee) La administración intentó evitar cualquier concentración potencialmente peligrosa de cualquier grupo específico de alemanes dentro del imperio dentro del imperio al otorgarles a los miembros de grupos de inmigrantes concesiones de tierras dispersas por todo el imperio. Con el tiempo, esta política fue abandonada y se permitió a tribus enteras cruzar la frontera y ocupar tierras a lo largo del lado romano de la frontera. Permitidos para conservar su propia organización política y otras costumbres, y generalmente libres de impuestos, se esperaba que defendieran su sección de la frontera y proporcionaran reclutas para el ejército romano. Tenga en cuenta que la práctica de la inmunidad territorial predijo una característica más de las prácticas militares de la Edad Media.

D. Las Grandes Invasiones

Los hunos de Asia central derrotaron a los ostrogodos y obligaron a los visigodos a buscar el estatus de federati y la protección del bajo Danubio (376). Sometidos a la tributación romana y otros abusos por parte de los administradores locales, se rebelaron y marcharon sobre Constantinopla para buscar reparación por parte del emperador. El emperador decidió no permitir tal precedente y dirigió el ejército romano oriental contra los visigodos. Los romanos fueron derrotados desastrosamente en la batalla de Adrianópolis (378) y el emperador murió. Un nuevo emperador, Teodosio (379-396) llegó de Occidente y estabilizó los asuntos al establecer a los visigodos en Iliria , la ex Yugoslavia.

En 402, apoyado y subvencionado por el Imperio de Oriente, el rey visigodo, Alarico , atacó Italia. Stilicho (STIHL-ih-cho), el comandante alemán de los ejércitos romanos occidentales, despojó las fronteras occidentales de las tropas para mantener a raya a Alaric. El día de Navidad de 406, las tribus germánicas de los alanos , vándalos y suevos(pronunciado "swaves") cruzaron un río congelado del Rin y las invasiones habían comenzado.

2. La "conquista bárbara"

Stilicho fue asesinado en 408, y, en 410, Alarico y los visigodos ingresaron a Italia y saquearon Roma.

El corazón del imperio no podía producir alimentos suficientes para alimentar a su población residente y había dependido de las importaciones de las regiones productoras de grano durante un tiempo considerable. Por lo tanto, era esencial para el comando romano aferrarse a las regiones que producían los excedentes de alimentos que necesitaban: Aquitania en el sur de Francia, Andalucía en el sur de España, África del Norte y las islas mediterráneas de Sicilia, Cerdeña y Córcega. A pesar de la importancia obvia de estas tierras para la supervivencia del imperio occidental, la administración imperial logró echarlos a todos.

El gobierno romano consiguió que los visigodos abandonaran Italia dándoles Aquitania, siempre que expulsaran a los vándalos que ocupaban Andalucía. Los visigodos invaden España en 429, y los vándalos, bajo el rey Gaiseric (hombre-ZEHR-ik), huyeron sobre el Estrecho de Gibraltar para comenzar la conquista del norte de África.

Mientras tanto, los visigodos decidieron mantener tanto Aquitania como Andalucía, y los vándalos descubrieron que habían capturado la base de la flota romana en Cartago junto con una gran parte de la flota romana occidental. Decididos a usarlo, se lanzaron al mar y, en unos pocos años, controlaron el Mediterráneo occidental, incluidas Sicilia, Cerdeña y Córcega. Hacia el 455, eran lo suficientemente fuertes como para lanzar una operación anfibia para capturar y saquear Roma.

3. La "caída" del Imperio Romano en el Weest

Los precios de los alimentos en Italia comenzaron a aumentar rápidamente, y el comandante alemán de los ejércitos romanos, Odovacar (OH-doe-vah-cur), pidió que se les otorgara tierras a las tropas para que pudieran obtener sus propios alimentos en lugar de recibir un dinero salario que parecía siempre insuficiente para mantenerse. El regente, Orestes (ohr-REHS-teez), se negó y Odovacar lo mató. El general depuso al niño emperador, Romulus Augustulus (RAHM-you-luhs aw-GUHST-you-luhs), lo hizo monje y lo envió a un agradable monasterio en la costa mediterránea. Luego envió la diadema, las túnicas moradas y las zapatillas rojas, los símbolos de la autoridad imperial, al emperador oriental con el comentario de que el Imperio Romano en Occidente había dejado de existir ( 476).)

En 486, bandas de francos bajo el joven jefe, Clodoveo , atacaron y conquistaron las tierras entre los ríos Sena y Loira en Francia que todavía estaban bajo el control de un oficial romano, Syagrius (ver-AG-ree-us). Las últimas tierras romanas estaban ahora en manos de líderes germánicos, excepto tal vez en Inglaterra. Este es el período generalmente asignado al casi legendario Rey Arturo . Puede ser que los britanos hayan elegido a su propio emperador, Ambrosius Aurelianus (AAM-broh-zee-uhs Aw-ree-lee-AHN-uhs), y que haya elegido a un líder galés, Uther Pendragon (OO-thuhr PEHN-drah -guhn) como su comandante del ejército. El hijo de Uther, Arthur, lo sucedió, y se hizo cargo de la coronación a la muerte de Ambrosius, pero esto es toda especulación.

El emperador romano oriental envió a los ostrogodos y a su rey Theodoric (thee-AHH-doh-rihk) contra Odovacar. En 489, Theodoric se las ingenió para matar a Odovacar y se instaló, con la aprobación del emperador oriental, como rey de Italia.

Ahora había una serie de reinos germánicos en Occidente: francos en Francia, visigodos en España, vándalos en el norte de África, ostrogodos en Italia y los nuevos burgundios en Suiza. Todos eran cristianos, pero los alemanes, a excepción de los francos, eran cristianos arrianos (AIR-ee-aan) y considerados herejes por sus súbditos nativos. Con el fin de fortalecer su control sobre la población mucho más numerosa, cada "rey" alemán solicitó y recibió un certificado de poderes delegados del emperador oriental.

DE HECHO , el Imperio Occidental ahora estaba en manos de una serie de reyes "bárbaros". En teoría , sin embargo, todos estos líderes alemanes eran simplemente tenientes del emperador oriental. Los romanos podían creer que el imperio no había caído, pero de hecho se había reunido.

Sin embargo, eso era solo teoría. La siguiente fase en el proceso de "la caída del imperio romano" se produjo cuando Justiniano , el emperador oriental (527-565), se vio obligado a reconocer el estado real de las cosas e intentó convertir esa unidad teórica en realidad.

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