La Lota

Hoy voy a hablaros de  un utensilio, que algunos conocereis y otros será la primera vez que ois hablar de él, llamado LOTA NASAL. Yo la utilizo bastante, sobre todo cuando estoy resfriada y tengo mucha mucosidad. Os la aconsejo.
La lota es un recipiente, con forma  de tetera, más o menos, que se utiliza para la limpieza y la higiene nasal. Con ella podemos limpiar la nariz, los compartimentos nasales y los senos craneales. Es un utensilio que utilizan mucho los yoguis.
La nariz es el único orificio que no limpiamos y que más utilizamos porque por ella pasan cada día gran cantidad de partículas, bacterias etc.. Lo mismo que nos cepillamos los dientes a diario, tendríamos que limpiar nuestra nariz de todos los gérmenes y bacterias que por ella se introducen.
La ducha nasal con la lota es una técnica rápida , eficaz y sencilla que proporciona confort, bienestar y con una sensación de nariz despejada muy agradable. Además carece de contraindicaciones.Si se utiliza a menudo, la lota ayuda a contrarrestar los efectos de la contaminación, el polvo y el polen. Es muy conveniente para personas con asmas, alergias y otros problemas respiratorios. En general, es conveniente para todos pues es la mejor manera de limpiar la nariz y mantener los conductos nasales despejados.
Si sientes molestias respiratorias, si tienes la nariz tapada o seca, si moqueas, si notas pérdida de olfato, la lota te proporcionará un alivio extraordinario.
La preparación es muy sencilla: basta con llenar la jarrita con agua templada, (que la notes agradable), suele ser entre 34 y 38º C,y disolver media cucharadita de sal marina en ella. Yo utilizo agua mineral y la introduzco unos segundos en el microondas.
Para usarla hay que inclinar suavemente la cabeza hacia un lado y ligeramente hacia delante e introducir el pitorro anatómico en un orificio nasal. La boca se mantiene ligeramente abierta para facilitar la respiración. A medida que el agua entra por un orificio, irá saliendo por el otro. Cuando ha pasado la mitad del contenido de la lota, se cambia y se repite el proceso con el otro orificio. Una vez hecho, hay que sonarse con suavidad para eliminar todo el líquido que haya quedado en las fosas nasales. Es tan sencillo, cómodo e indoloro que muchos niños lo realizan sin ningún tipo de problema.
La ducha nasal se puede realizar una vez por día o incluso 2 o tres veces en caso de estar resfriado con mucha mucosidad. Es mucho mejor que un spray de la farmacia y mucho más sano.

Ana Hidalgo