Revista Coaching

La Mágia En El Poder De La Intención

Por Alex_chinea @alex_chinea
el poder de la intención

el poder de la intención

En estos días estaba ojeando un libro de Wayne Dyer que se titulaba El Poder de la Intención. Un libro interesantísimo que me hizo reflexionar aún más sobre nuestra habilidad para crear la vida que se nos abre a nuestro paso.

Muchas veces, nos dejamos influenciar por las situaciones que se nos presentan y no tomamos consciencia de que esas reacciones negativas que podamos tomar, alimentan nuestro ego y nos desconectamos de la fuente primigenia.

Nosotros y todo lo que vemos, oímos y experimentamos proviene de esa fuente, proviene de una intención.

Porque esa fuente divina de la cual procedemos, es tan abundante que no conoce ningún tipo de carencia. Si piensas que te falta algo, esa fuente simplemente te responderá en tu vida con hechos en los que se manifieste esa carencia.

Una frase que me gustó mucho de Dyer es que “cuando cambias la forma en que ves las cosas, las cosas que ves, cambian”.

Y para afirmar esto,  se basa en un hecho científico de que precisamente en los niveles subatómicos, en los que por más que miremos con un microscopio hasta la partícula más pequeña, vemos que esas partículas se mueven según la posición del observador.

Y que por más que persistamos en proseguir adentrarnos a ese mundo subatómico, para descubrir la fuente de todo lo que vemos, escuchamos y experimentamos, sería imposible para nosotros, en la materia, hallar esa fuente.

Porque esa misma causa primera de todas las cosas es infinita. No tiene fronteras. No tiene principio ni fin. Y según sea tu punto de vista sobre las cosas, como si fueras un mero observador, las cosas se moldean a tu punto de vista.

Por eso Wayne también habla de “imaginarnos las condiciones que queremos crear”. Esa fuerza que genera el poder  de la intención, viene precisamente de esa capacidad de imaginarnos, en todo momento, aquello que queremos crear.

Si quieres ser arquitecto, montar un negocio o reconciliarte con alguien, debes imaginarte esas condiciones que te permitan establecer esa armonía con la fuente, de manera que atraigas precisamente eso que quieres en tu vida.

Éstas ideas de grandes oradores espirituales y del desarrollo personal como Wayne Dyer, me siguen generando una profunda  huella en mi propio camino de mi crecimiento personal.

La verdad, el hecho de escribir diariamente sobre desarrollo personal no me convierte en una persona perfecta, sino todo lo contrario. Pero se que estoy caminando por el sendero de la perfección.

Creo que todos de alguna manera lo hacemos. Y que algunos toman y tomarán caminos más certeros, así como otros prefieren y preferirán caminar entre sombras. Pero todos estamos conectados de alguna manera con la fuente. Pero como dice Dyer, el poder de la la intención es precisamente estar consciente de estar conectado con ella.

Y reconozco que cuando he sentido tristeza, desaliento, rabia o cualquier situación que genere en mí una actitud negativa, me siento despegado de la fuente y no avanzo. Todo se convierte en un caos.

Pero si en vez de ir en contra la marea, nos dejamos llevar por ella, todo converge en un baile armónico en el que las cosas se van poniendo todas por sí mismas en su lugar.

Por eso siempre insisto en utilizar los pensamientos positivos y la imaginación, para “crear”, la vida que tanto deseas.

Por que cuando creas, te conectas con la fuente, con Dios, la causa centro primera, la energía o como lo quieras llamar.  

Porque cuando eres bueno, entendiéndose como hacer un bien a alguien, también te conectas con la fuente.

Porque cuando contemplas la belleza en un cuadro, en alguien, en un dibujo que hiciste, en el mar, el cielo estrellado, etc.,  también te conectas con el creador.

Porque cuando aprecias la verdad, de igual forma estableces un vínculo limpio y puro hacia aquel que te creó. 

Conectarse con la fuente lo entiendo yo como enchufarse a ella. Enchufarse a esa energía positiva como si fuéramos pilas desgastadas por el stress, el cansancio, la negatividad, y ser recargados por una energía limpia, positiva e infinitamente abundante.

Pero para ello debemos reconocer esa fuente original de la cual todos procedemos.

Es curioso que el origen etimológico de religión es religare volver a ligar. Y la verdadera religión es esa precisamente, volver a conectar con Dios o como mejor prefieras llamarlo.

Siempre hablo de hacer metas, del éxito, la motivación, que son factores claves para la autorrealización, pero no puedo dejar de lado esa parte espiritual que me equilibra y me reclama, la que Wayne Dyer llama la conexión con la fuente de energía. El origen y principio de todas las cosas. La que nos originó a ti y a mi.

:)
;)

Un abrazo

Alexander Chinea


Volver a la Portada de Logo Paperblog