No es un secreto para la ciencia que el envejecimiento está relacionado principalmente con la disfunción de las mitocondrias. Es cierto que están los telómeros, la luz ultravioleta, las células madre, los senolíticos, e incluso el paso del tiempo, pero son las mitocondrias son las generadoras de energía de nuestras células.
Son la clave del metabolismo energético, es decir, de la producción de energía en el corazón de nuestras células. Sin embargo, cuando los 10.000 billones de mitocondrias presentes en nuestro cuerpo funcionan mal, se producen graves trastornos.
Este hecho no se les escapó a los investigadores de la Universidad de París que en 2013 publicaron los resultados de una extensa investigación en la que concluyeron que los trastornos de las mitocondrias están relacionados con una mayor sensibilidad a la toxicidad de medicamentos, las fuertes migrañas, la esterilidad en ambos sexos, las enfermedades del riñón y del hígado y algunos tipos de cánceres entre otras enfermedades.
Para limitar estos trastornos, los científicos trataron las mitocondrias con moléculas «bioactivas» con el fin de estimularlas.
Hoy en día se habla de «medicina mitocondrial» a esta disciplina que busca que las mitocondrias vuelvan a ser totalmente eficientes.
El objetivo de esta rama es conseguir que las personas mayores puedan vivir al mismo ritmo que sus hijos o nietos, caminar o viajar, cultivar su huerto, volver a hacer deporte… en definitiva, poder tener una vida activa.
Algunas de las moléculas bioestimulantes de las mitocondrias son conocidas. Pero otras apenas empiezan a revelar su potencial. La más conocida de las moléculas que estimula las mitocondrias es la coenzima Q10.
De hecho es un nutriente increíblemente eficaz, que aumenta considerablemente el ritmo de funcionamiento de sus mitocondrias (las principales productoras de energía de todas nuestras células).
Pero por muy extraordinaria que sea la coenzima Q10, no es capaz de crear
nuevas mitocondrias en sus células.
De hecho, a medida que se envejece, más mueren las mitocondrias, sin poder renovarse. En realidad, si comparamos una persona de 40 años con otra de 67 años, esta última ha perdido una de cada dos de sus mitocondrias en cada década!
Además, cuanto más envejecen las mitocondrias, menos eficaces son a la hora de producir energía.
¿Hay alguna manera de contrarrestar esto?
Tomar coenzima Q10 no es suficiente, ya que necesita un aliado para complementar su acción. Este aliado (o cofactor) es otro nutriente,que tiene la capacidad de multiplicar el número de mitocondrias en las células cuando se combina con la coenzima Q10.
El corazón, su cerebro, y de hecho TODO su cuerpo encontrarán más nueva energía gracias a las mitocondrias. Este deslumbrante avance va más allá del simple marco de la micronutrición.
Se trata de una sustancia llamada PQQ, que multiplica la producción de mitocondrias en el organismo.
La PQQ es una molécula cercana a las vitaminas del grupo B, que se encuentra en todas partes, tanto en el suelo como en los organismos vivos, plantas, animales o seres humanos.
PQQ es el acrónimo de PirroloQuinolina Quinona. En las publicaciones científicas también se denomina a veces metoxatina.
La PQQ por sí sola es una verdadera bomba científica capaz de multiplicar la producción mitocondrial. Hasta hace poco, se afirmaba que sólo el ejercicio físico y una dieta estricta y baja en calorías podrían aumentar la producción de mitocondrias en las células. Sin embargo, ahora sabemos que esto es muy incompleto y que la mejor manera de aumentar esta producción es con suplementos de PQQ.
A la derecha una célula «normal» con las mitocondrias, los puntos negros. A la izquierda la misma célula unos días DESPUÉS de un suplemento de PQQ: ¡el número de mitocondrias en la célula literalmente se ha multiplicado!
La PQQ es la fuente de la juventud mitocondrial para sus células. El proceso de envejecimiento se ralentiza porque fomenta la producción de nuevas mitocondrias en su cuerpo.
No se trata de “milagros” sino de una acción química completamente lógica. Si las mitocondrias cumplen una función en el organismo, si conseguimos aumentar su actividad, estas funciones se verán mejoradas.
La CoQ10 es parte de la familia de nutrientes que ayudan a apoyar la función mitocondrial. Por otro lado, la PQQ es el único nutriente existente que hasta donde sé es capaz de generar nuevas mitocondrias.
¿Qué otras funciones cumple la PirroloQuinolina Quinona?
Otro estudio científico de China realizado en 2014, cuyos resultados fueron publicados en una revista científica sobriamente llamada Cáncer, demostraba que la ausencia de PQQ podría estar relacionada con la proliferación de ciertas células cancerígenas.
Por eso, la PQQ no ha terminado de sorprender a la comunidad científica internacional. Cada año, la ciencia está obteniendo más y más resultados sobre el potencial de esta molécula esencial.
Lo que coinciden varias investigaciones, sin duda, es que queda científicamente demostrado que la PQQ puede favorecer un envejecimiento saludable.
¿Es la PQQ es 5.000 veces más potente que la vitamina C?
La PQQ está cargada de electrones. Sin embargo, los radicales libres, responsables del envejecimiento de nuestras células, son moléculas a las que les falta un electrón.
La PQQ puede aportarles este electrón y así neutralizar su carga, y se ha demostrado que la PQQ es significativamente más eficaz, desde 30 hasta 5.000 veces más que la vitamina C según un estudio realizado en el año 2000 por un equipo de la Universidad de Davis en California, debido a su alta estabilidad molecular.
Esto significa que esta molécula es capaz de «recibir» una gran carga eléctrica sin autodestruirse: 5.000 veces más que una molécula de ácido ascórbico (el otro nombre de la vitamina C). Por lo tanto, es 5.000 veces más resistente que la vitamina C.
Los antioxidantes orgánicos son inestables por naturaleza, pero en lo que se refiere a la PQQ, tiene una notable estabilidad molecular, permitiéndole transferir miles de electrones, particularmente neutralizando los superóxidos O2– e hidroxilo HO–, dos causas principales de disfunción mitocondrial. Estos iones son además responsables del estrés oxidativo.
CoQ10, un aliado antiedad ideal para la PQQ
Al igual que la PQQ, la coenzima Q10 es el nutriente que apoya el funcionamiento de las mitocondrias existentes. Y resulta que la CoQ10 trabaja en conjunto con la PQQ para producir otros efectos asombrosos.
Cuando se combina la PQQ con la CoQ10, existe un efecto complementario en las mitocondrias..
La PQQ es extraordinariamente eficaz para proteger las mitocondrias y estimular la creación de nuevas mitocondrias, mientras que la CoQ10 está directamente involucrada en el funcionamiento de las mitocondrias dentro de la célula.
Cómo ajustar los niveles de coenzima Q10 y PQQ
La manera más eficaz es con cápsulas de Q10 más PQQ. Esta es la forma más segura de mantener sus mitocondrias y también de hacer crecer otras nuevas.
La fórmula Q10 Más PQQ, gracias a los ingredientes activos especialmente seleccionados, es única en España. De hecho, hasta que yo sepa el laboratorio de medicamentos y suplementos naturales Cell’innov son los únicos que asocian PQQ con una fórmula única de coenzima Q10 llamada cavaQ10. No creo que exista otra fórmula con la misma cantidad de nutrientes y tantos estudios clínicos que la respalden.
Todo esto consumiendo una cápsula al día.
Cada día, con la fórmula Q10 Más PQQ :
- 10 mg de PQQ: Esta forma altamente purificada de PQQ se produce por fermentación y se considera uno de los niveles más altos de PQQ en el mundo.
- 225 mg de CavaQ10: El CavaQ10 es uno de los estándares mundiales de la coenzima Q10. Esta dosis extra fuerte es biológicamente idéntica a la CoQ10 producida naturalmente por su propio cuerpo para que se absorba más rápidamente. Además, la molécula de CavaQ10 está «recubierta» con una estructura de gamma-ciclodextrina que es como un «portador». Tiene la particularidad de hacer que la coenzima Q10 sea hasta 18 veces más biodisponible.
La desaparición progresiva de las mitocondrias y la disminución de su eficacia es una espada de Damocles que pesa sobre nuestra salud. Si no tomamos ninguna medida al respecto, quedaremos expuestos.
El estudio realizado por investigadores de la Universidad de París antes citado, publicado en 2013, los resume así:
- Empieza con la fatiga.
- Y llega hasta dolerle y nublar el cerebro.
- La piel envejece prematuramente.
- Tiene una mayor sensibilidad a la toxicidad de las enfermedades.
Q10 Más PQQ puede ser una buena ayuda a la hora de reforzar o incluso hasta estimular la creación de nuevas mitocondrias. Y un mayor funcionamiento de las mitocondrias permite una importante producción de energía celular. Esta energía es esencial para una buena salud a largo plazo.
Como dijimos, esta es la única fórmula que junta PQQ y coenzima Q10 en forma de cavaQ10.
La coenzima Q10 tiene muchos otros roles en su cuerpo. Ayuda al buen funcionamiento de las mitocondrias que son las que producen la energía para:
- Ayudar a la regeneración de su cerebro, hígado, pulmones y todos sus órganos vitales.
- Dar un impulso a cada órgano y músculo de su cuerpo.
- Mantener sus capacidades mentales y la salud de su cerebro.
- Reforzar su sistema inmunológico.
- Reemplazar sus células dañadas por otras nuevas y sanas.
- Mantener su capacidad mental y su salud cerebral.
- Estimular a los espermatozoides, que consumen mucha energía.
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Este post es autoría de Ecocosas puedes ver la entrada original en La medicina mitocondrial al rescate de sus células
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