¿La meditación es parte de la espiritualidad?

Podemos tomarlo inicialmente como una práctica de relajación donde le permitiremos a la mente ración al ¨descansar¨ por un momento, logrando que el cuerpo libere tensión acumulada durante el día y evitar dolores musculares y jaquecas, sin la necesidad de seguir ninguna creencia religiosa o mística en particular, solo situarte en tu centro y mejorar los niveles de enfoque y concentración.

Muchas personas, después de un tiempo de practicar algún tipo de meditación, comienzan a escuchar su propia ¨voz interior¨ que fue ignorada por años… descubriendo así una nueva dimensión espiritual, accediendo a una experiencia mística de intimidad con su propia naturaleza divina, siendo una vivencia subjetiva muy difícil de describir en palabras, en este nivel es posible abordar la meditación no solo como una técnia, sino como momento de común-union en nuestra existencia.

Como meditar

Si deseas comenzar a meditar y lograr que se convierta en un hábito diario que llegues a disfrutar, dispones aquí de algunas recomendaciones:

1- Define un tiempo-espacio diario. Lo ideal es que elijas un momento por la mañana, antes de desayunar, generalmente es posible acceder a un momento de tranquilidad que te permita contar con unos 15 a 30 minutos sin ruidos ni interrupciones. Quizás sea una buena opción que te levantes antes que el resto de la familia, al principio parecerá un poco tedioso pero pronto los encontrarás como un hábito reconfortante.

2- Implementa un aseo personal correcto. Es bueno, darte una ducha antes de meditar, no es algo imprescindible, pero es una buena forma de sacralizar ese momento de intimidad con tu naturaleza divina.

3- Utiliza ropa cómoda. Esto es importante para lograr meditar sin estar concentrado en ciertas incomodidades físicas que pueda ocasionar la ropa no apropiada.

4- Busca un lugar confortable. Un Lugar tranquilo y luminoso es lo ideal, si es en un parque, un patio o una terraza mejor. Sino, cualquier lugar que te permita estar traquil@

5- Trata de no utilizar elementos externos. Para este tipo de meditación, tarta de no utilizar ningún apoyo externo en cuanto a música, perfumes, sahumerios, etc. Si existen muchos ruidos que puedan distraerte, utiliza auriculares y una música suave de fondo.

6- Elige una postura cómoda. No es necesario que realices inicialmente posturas complejas de yoga, puedes estar sentado en un almoadón, una silla o cruzad@ de piernas, con la columna derecha y la cabeza en posición relajada alineada con la columna (no en posición mirando hacia abajo) Los hombros deben estar relajados al igual que los brazos y las piernas.

7- Concéntrate en tu respiración. Es una buena forma de dirigir tu atención, atendiendo tu respiración que sea profunda y lenta. Exhalando con un sonido.

8- Aquieta tu mente. Trata de aquietar tu mente, es la parte más difícil… no pongas resistencia, solo deja que se disuelvan aquellas ideas o imágenes que vienen de forma involuntaria…

9- Céntrate en una imagen mental. Este es un punto importante, es clave para dirigir conscientemente tu atención, al principio solo podrás hacerlo por pocos segundos pero no te preocupes. Céntrate en una imagen que podrás mirar directamente (o visualizarla lo más claramente posible) sin atender lo que esté alrededor de ella, podrás elegir mirar una flor en particular, solo eso debes ver y pensar en esa flor (o cualquier otra cosa que elijas) Se consciente cuando otro pensamiento se cuela…

Fuente de la Información: http://www.grupo-millenium.org/posts/la-meditacion-diaria2/