En los primeros años de la llamada transición política, según nos cuenta Gregorio Morán en una entrevista en Jot Down (http://www.jotdown.es), Alfonso Rojo era fotoperiodista y representante sindical de la C.N.T. :
“JOT DOWN: En la página web de la Fundación March se puede consultar el Archivo Linz de la Transición española. En ese archivo se guarda la noticia que el diario El Alcázar publicó el 21 de mayo de 1977 sobre su detención. Le leo, por lo curioso que hoy resulta, el final de la noticia: «El tribunal que entiende el caso planteado abrió proceso contra Gregorio Morán el pasado 10 de mayo que se encuentra en estos momentos en libertad condicional, tras haber pagado una fianza de doscientas mil pesetas. El señor Conesa pide una indemnización de veinte millones de pesetas, pues estima que la publicación le ha perjudicado una operación que mantenía con la editorial Planeta». Parece que con su reportaje en Diario 16 fastidió el negocio de este señor para publicar algo en Planeta.
GREGORIO MORÁN: Sí, claro, seguro que tenía ya hablado con la editorial la publicación de un libro. Puede que para contar la liberación de los generales secuestrados por el GRAPO, el grupo terrorista. No lo sé. El periodismo durante la Transición no se puede afirmar de forma categórica que fuera más libre. Sí que fue más caótico. Había más posibilidades. Por ejemplo me acuerdo de lo que entonces era ser fotógrafo de prensa. Entonces había una cantera magnífica de fotógrafos. Es verdad que luego la trayectoria que han seguido algunos de esos fotógrafos fue curiosa. Por ejemplo yo me acuerdo de que el fotógrafo más audaz —no el mejor técnicamente, pero sí el más valiente— era Alfonso Rojo. Entonces Alfonso era mi fotógrafo y además era el representante de la CNT. Vete a recordárselo ahora. Y nos metimos en unos líos tremendos. Porque entonces investigaba yo las tramas ultraderechistas y ese es un tema delicado.”
http://www.jotdowun.es/2013/12/gregorio-moran-los-padres-de-la-transicion-eran-absolutamente-impresentables/
Alfonso Rojo fue también reportero de guerra, conviviendo con los guerrilleros sandinistas durante la guerra civil nicaragüense. También cubrió las guerras de Irak (en 1991 y en 2003) y Afganistán. (https://es.wikipedia.org/wiki/Alfonso_Rojo).
Y tras ser despedido en 2004 de El Mundo, medio del que fue miembro fundador, por sus desavenencias con Pedrojota, asume la dirección de Periodista Digital. Medio pequeño, en palabras del propio Rojo, que él pone a disposición del PP y se integra en el entramado de medios de comunicación que apoyan a este partido. Esto le vale para, además de recibir las ayudas o subvenciones del poder político, integrarse en la plantilla de periodistas al servicio del PP. Y así es llamado a intervenir en varias de las tertulias políticas que ponen en funcionamiento desde las televisiones autonómicas controladas por el PP.
A día de hoy, Alfonso Rojo es, básicamente, tertuliano. Se pasa la vida de plató en plató, formando parte de la plantilla habitual de tertulianos y tertulianas (de todos conocida), como si en este nuestro país no hubiera periodistas y personas con opiniones y discursos más sólidos y fundamentados que las y los de estos paniaguados del poder.