Escuchando el tema "Miradas de Axel me inspiré para realizar este artículo. La mirada, los ojos, son un espejo del alma, es la puerta de entrada a nuestro lugar más sagrado. La mirada refleja el estado puro de nuestro espíritu, en una mirada podemos ver amor, ausencia, miedo, rencor, envidia. La mirada es la ventana emocional de quien tenemos enfrente.
Como dice la canción de Axel:
"Hay miradas tan serenas que consuelan y acarician
Hay miradas insistentes, misteriosas, recurrentes
Y las hay indiferentes, como las de tanta gente
Hay miradas que ocultan verdades. Que mucho dañan.
Y las hay que en la diaria lucha fortalecen y acompañan.
Y hay miradas que cautivan por lo bellas y profundas.
Hay miradas que por tristes enlutan a quien las viste.
Y hay esas miradas dulces que ennoblecen a quien las luce.
Hay miradas que derriten hasta el corazón más duro e iluminan suavemente el pensamiento más oscuro. "
A través de una mirada podemos saber mucho de los demás. Sus miedos, sus alegrias, podemos intuir sus tristezas y hasta sus intenciones. Pero existe algo mucho más importante: ¿sabemos cómo miramos a los demás?, ¿sabemos qué les estamos entregando a los demas?, ¿miramos con ternura nuestro entorno?, ¿cómo miramos a nuestros amigos, pareja e hijos?.
La mirada es una entrega, una invitación. ¿Cuánto tiempo pasamos observando y contemplando nuestra propia mirada?. ¿Sabemos qué estamos entregando a los demás a través de nuestra mirada?. ¿Qué perciben los demás de nosotros en nuestra mirada?. Saber cómo miramos y qué reflejamos a través de nuestra mirada es tan importante como saber observar la mirada de los demás.
Quiero compartir un ejercicio muy sencillo que nos muestra el estado emocional en el cual nos encontramos y que reflejamos a los demás. Enfrente de un espejo comienza a mirarte, observa tu rostro, observando la apariencia de tus cejas, si están fruncidas o relajadas. Observa tu rostro en su totalidad , ¿trasmite ternura, miedo, resistencia, frialdad, tristeza, enojo, calma?. Cualquier cosa que veas te estará mostrando qué ven los demás, es un gran ejercicio de auto observación, de contemplación. Luego comienza a ver y observar tu mirada, ¿es fría, cálida, tiene tristeza, qué ves?. Déjate ir en tu mirada, es un océano infinito de información que habla de ti. Todo aquello que observes te mostrará en el estado emocional, mental y espiritual en que te encuentras.
Este ejercicio es de auto observación. Nos lo pasamos nuestros días observando a los demás, pero nos olvidamos de nosotros mismos. Quien se observa a si mismo madura, crece. Osho dice:
"La gente es básicamente sus ojos. La gente es básicamente sus ojos. Si puedes ver los ojos de otra persona, su profundidad es la profundidad de la persona. Una persona astuta no te permitirá que le mires directamente a los ojos, porque los ojos revelan su astucia. Los ojos son simplemente una apertura, la persona astuta tiene miedo; siempre mirará de lado. Estará hablando contigo pero mirando a otro lugar; su conversación y su visión no seguirán la misma dirección. Te escuchará pero sus ojos no estarán concentrados en ti. El hombre que quiere engañarte no puede confrontarte directamente. Sólo una persona simple, una persona sincera, una persona con un corazón amoroso y sin deseos ocultos te permitirá mirarle a los ojos porque sabe que encontrarás su verdad. No tiene nada que ocultar". Osho "Más allá de la psicología"
Los ojos, la mirada, son el espejo del alma, observarla es ver qué reflejamos a los demás. Quiero terminar este artículo con la canción de Axel "Miradas". Deseo con todo el alma que la disfruten.
¡Bendiciones infinitas desde el alma!.
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