La música de antes

Probablemente uno de los prejuicios más difíciles de romper sea el que establece a la música clásica como música “vieja”. Tal concepción puede ser muy complicada de rebatir, sobre todo cuando en el mundo de la música popular, una canción lanzada hace un año, ya es vieja o pasada de moda. ¿Cómo librar de esta idea errónea de vejez a las obras de los grandes maestros, cuando efectivamente se han compuesto hasta siglos atrás en el pasado?
El error nace (y esto no solo lo hace el público, también muchos expertos en música) al considerar de manera irrefutable una línea de evolución que une a la música de los grandes maestros con la música popular actual. He escuchado a cantantes actuales (música popular)  que mencionan a los grandes maestros como diciendo “sí… ellos nos han enseñado la música y nosotros seguimos el camino por ellos marcado”. Ajá… 

La idea que de Beethoven y Liszt surgió el rock (o ideas similares) me parece más un triste intento de justificar a la “música” actual como algo de similar importancia artística. Pero eso será tema de discusión en otro momento. El punto que es necesario tener en cuenta, es que la mayoría de personas tienen esa idea simple de la evolución de la música y de los gustos musicales: de Mozart llegamos hasta Justin Bieber, así es la historia y no hay nada más que decir.
¿Peroqué pasa si esta línea de evolución es correcta? 
Si nos introducimos en el mundo de la música actual, vemos que lo importante es la moda, lo que suena ahora, lo que se genera continuamente. Existen sin embargo los términos “música de los 60s”, “música de los 80s”, etcétera.  Estos términos nos hacen ver que podemos aún recordar temas de décadas pasadas, pero es evidente que la etiqueta más fuerte e implícita es la de “música de antes”. Podemos regocijarnos hoy con un tema de los 70s, pero la cruda verdad  consiste en que no podemos quitarnos la idea de que esa música es de los 70s y no de esta época. Sabemos que fue en los 70s donde ese tema era “lo de moda” y que fue en esa época donde todos se regocijaban con ese tema, donde todos los conocían y por lo tanto, fue en esa época donde más valor representó; porque recordemos que lo que más importa, es lo que suena en el momento. Este efecto se hace más drástico cuando las piezas de moda son muy representativas al entorno cultural preciso de la época en que son lanzadas. Esto hace que lo “pasado” se vuelva “ajeno” a nuestros gustos actuales. Si eso pasa con unas cuantas décadas de distancia, ¿acaso no se esperaría ese efecto aún más pronunciado con la música clásica? Yo pienso que en muchas personas (y uno que otro crítico) existe la siguiente idea inconsciente:
“la música clásica es la música de antes, porque esa música se conectaba con las personas de ese entonces, no es extraño entonces que hoy en día, no  nos sintamos atraídos a ella, porque no nos representa en nuestra vida y entorno actuales”.
Claro que, podemos siempre tomar de vez en cuando una canción de los 80s y decir que sigue “funcionando” o que “no pasa de moda”, pero eso es solo un efecto del melancólico, aferrado a lo que la pieza significó en el pasado. Desgraciadamente, muchos piensan que eso es la música clásica  (sobre todo la música de los grandes maestros) hoy en día: Música de antes que ciertos melancólicos se niegan a dejar pasar.
Y para muchos tiene sentido. Todo debido a considerar la música popular actual y la música clásica como elementos de una línea de evolución única. Nuestro viaje por el siglo XX terminó en los que se piensa hoy en día,  que se tratan simplemente de “tipos de música diferentes” (pero de lo mismo al fin y al cabo) en estilo y en tiempo. Es obvio que algo debe andar mal en todo esto.
Este tema lo continuaré en otro post.