La “nave del misterio” de Iker Jiménez aterriza en Gijón

Con motivo de su gran éxito en Madrid, la exposición Cuarto Milenio viaja a Gijón (Asturias) donde permanecerá del 26 de Junio al 12 de Julio en el Palacio Revillagigedo.

Una exposición en la que los amantes del programa (y todos aquellos que no pongan  límites a su imaginación) podrán ver y “sufrir” en directo, con una selección de objetos e historias seleccionadas por Iker Jiménez y su equipo. Ellos son los encargados de acercarnos el misterio, atravesando la pantalla que cada domingo por la noche nos permite subirnos a su nave.

Cuarto Milenio es “¿por qué no decirlo?”, un programa polivalente. Sus seguidores me entenderán cuando digo que puede llegar a ser didáctico y aterrador a partes iguales. Es una especie de entretenimiento sufrido, que mezcla el “tengo que cambiar de canal o no duermo” cuando hablan de cosas realmente espeluznantes, pero también el “voy a volverlo a poner” porque, aunque estén tratando temas que pertenecen a tus miedos mas profundos de tu infancia, madurez o vejez. En definitiva, hay algo que te atrapa en la manera que su presentador y equipo de expertos, desarrollan los temas.

Esta exposición nos acerca a criaturas e historias que, al menos en mi caso, me hacen sentir, como aquella adolescente fascinada por series como “Expediente X”, “Más allá del límite” o películas como “Parque Jurásico” y libros como la “Historia Interminable”,  entre muchos otros, todo ello mezclado con una música muy inquietante que te mantiene en tensión, desde que entras hasta que sales.

Recuperando lo que mencionaba anteriormente sobre lo polivalente que me parece el programa, en mi visita a la exposición en Madrid, no pude evitar fijarme en el perfil de visitantes y descubrí que no había uno en concreto pese a lo que puede parecer. Esperando encontrarme con un público más bien joven o de mediana edad, me sorprendí haciendo un par de fotos a señoras mas bien mayores, y muy adorables tengo que decir, que te pedían dulcemente que las retrataras al lado del Yeti o de Nosferatu y que habían acudido solas o en familia a vivir la experiencia de la exposición.

Creo que parte del éxito del programa y de esta exposición, además del equipo y del gran carisma de su conductor Iker Jiménez, es que cada vez gusta a más personas de todas las edades y creencias, y por eso espero que esta nave siga viajando y dándonos la oportunidad de creernos o no historias fascinantes.