El presente trabajo trata de demostrar la importancia de la participación ciudadana en el vigente ambiente de crisis económica, política y social. En el que se produce cada vez una mayor desafección y desinterés por las políticas públicas. Agrandándose la brecha entre administradores y administrados. Propugnando como antídoto ante este mal que arrecia en los albores del siglo XXI, pasar de una democracia representativa a otra participativa. Empezando por la Administración más cercana al ciudadano, los Ayuntamientos. Para ello se analizan las normas legales ya existentes, como pueden ser los Reglamentos de Participación Ciudadana. La gran importancia de las TICs en este contexto. Además se sugiere dirigirnos a un sistema de elección uninominal por circunscripción electoral, lo que estrecharía la relación entre el edil electo y el ciudadano. Como refuerzo de esta tesis se situaría el paso de la figura del “strong-mayor” al “city-manager”. Igualmente se aboga por crear Consejos de Participación, así como otros Sectoriales. Y finalmente por los presupuestos participativos a la hora de establecer qué inversiones realizar anualmente. (Pinchar aquí para descargar pdf)