“La pasta e Mobile”

Si tiene una buena idea de negocio y es capaz de venderla por medio del móvil es probable que gane dinero en los próximos años, si además esa oportunidad de comercio electrónico se realiza por medio de una aplicación diseñada para los smartphone, probablemente se haga rico.
La velocidad con la que avanza la sociedad digital y los cambios que se producen en la misma son cada vez mayores, incrementando en mayor medida la brecha digital, no ya entre las personas que saben usar las nuevas tecnologías y los que no (llamados analfabetos digitales) sino entre los usuarios que las conocen, que en muchas ocasiones se ven incapacitados de estar al día de todo aquello que tiene que ver con la revolución digital.
Cuando muchas empresas todavía no tienen página web, o si la tienen todavía es de la generación 1.0, no se plantean acciones de video marketing, no han hecho campañas de publicidad en Google o carecen de página en Facebook, por citar algunos ejemplos “viejos” de la nueva economía de empresa digital, comienza a pegar con fuerza el mobile marketing, o traducido, las acciones de marketing, venta y pago que se pueden hacer con un teléfono móvil inteligente o smartphone.
Se trata de una herramienta muy poderosa en la medida de que el móvil forma parte de nuestra vida, sino de ya de nuestra personalidad, lo llevamos siempre con nosotros y estamos conectados las 24 horas del día. Piense sino cuánto hace que no apaga su teléfono por la noche.
Las grandes marcas no van a desaprovechar esta oportunidad, lo que unido a la web 2.0, la facilidad de conexión a internet y la alta penetración de teléfonos inteligentes (en España ya superan el 85%), hace que lo que hemos vivido hasta ahora en lo referente a publicidad móvil sea un juego de niños en comparación con lo que está por venir.
Según datos de la Mobile Marketing Association Spain http://mmaspain.com , la inversión publicitaria en este soporte en el año 2013 fue de 110 millones de euros, una cifra modesta todavía aunque su tendencia es alcista en lo que llevamos de año, pero lo que no hay que perder de vista es que los móviles generaron el 20 por ciento de la navegación en internet en todo el mundo durante el año pasado, según StatCounter http://statcounter.com
Por su parte, según hizo público Google, casi el 25% de las búsquedas se realizaron desde dispositivos móviles. Y que nos gusta este dispositivo más que a un tonto un caramelo lo demuestraque en 2013 los ingresos anuales mundiales generados por productos y servicios de entretenimiento móvil alcanzarán los 75.000 millones de dólares según un informe de Juniper Research http://www.juniperresearch.com
Esto indica claramente una migración de la pantalla del ordenador tradicional a la del smartphone, con las consecuencias que ello implica en hábitos de compra. Ahora existe un tipo de consumidor nativo digital, que se informa de lo que necesita en cualquier sitio: en un terraza tomando algo, en el autobús, en el metro o tranvía; viendo la tele en el salón de casa o en su habitación, lo que se ha dado en llamar el fenómeno multipantalla, y que no tiene miedo a comprar y pagar usando este dispositivo.
Pero no solamente esta generación usa el móvil para realizar la primera parte del proceso de compra, informarse para adquirir un producto o servicio por medio del móvil ya lo realiza el 63% de la población española, y para ilustrar esto basta con ir a una gran ciudad y viajar en transporte público. Libros y periódicos se han cambiado por personas enganchadas a su teléfono.
Así pues, por la parte de los usuarios el mercado ya está preparado: prácticamente un cien por cien de teléfonos inteligentes, uso las 24 horas del día y desde cualquier lugar, descargas de aplicaciones de ocio y pago por ellas, y navegación desde el móvil. Ante un mercado maduro como este muy pronto las grandes empresas, y también las pymes y autónomos, ¿por qué no?, empezarán a potenciar sus acciones de mobile marketing abriendo un mundo de posibilidades creativas, de empleo y de facilidades para los usuarios de las mismas.
Publicado por Javier Atienza