Revista Cine

“La pequeña Venecia (Shun Li y el poeta)”: Ríos de poesía y soledad

Publicado el 01 noviembre 2012 por La Mirada De Ulises

[6/10]    ”Nuestras vidas son los ríos que van a dar al mar, que es el morir”. Son palabras de Jorge Manrique que llora la muerte de su padre, y también versos del poeta chino al que recuerda Shun Li en “La pequeña Venecia (Shun Li y el poeta)”, y ante el que su amigo Bepi matiza apuntando que no todos los ríos desembocan en el mar, porque algunos se quedan atrapados en estanques. En ese sugerente diálogo, lo mismo que en las bellas secuencias en que otra joven oriental danza en la playa, queda sintetizada la película de Andrea Segre tanto en su mensaje como en su forma cinematográfica. El italiano se acerca a la soledad y a la mezquindad de la condición humana a partir de la historia de Shun Li y de su amigo Bepi. Ella es una inmigrante que vive en Roma atrapada en las redes de la mafia china, y que es trasladada forzosamente a la localidad de Chioggia para trabajar en un bar con la esperanza de que le traigan a su hijo desde China. Él es un pescador eslavo con espíritu de poeta y una miserable chabola en medio de la laguna veneciana. Ambos se conocen en el bar y rápidamente conectan en su soledad… y también en su sensibilidad.

“La pequeña Venecia (Shun Li y el poeta)”: Ríos de poesía y soledad

Película metafórica y contemplativa que mira al fondo del alma humana para descubrir sus deseos de felicidad y apuntar a la amistad como el camino para conseguirla. Esa es la situación interior de Li y de Bepi, de profunda soledad y con el anhelo por compartir las inquietudes que sufren, y esa la sintonía que se da entre ellos cuando se conocen en el bar y comienzan a bucear uno en el interior del otro. Son islas rodeadas de un mar de mezquindad, donde la mafia china priva de libertad y somete al individuo hasta cosificarlo, o donde los lugareños venecianos piensan mal de cualquier relación y no aspiran más que a dar rienda a su instinto animal. En ese entorno de desconfianza y falta de respeto a la dignidad humana, la poesía de presenta como manifestación de la espiritualidad y sensibilidad que une a personas de distinta cultura y condición, y sirve a Segre para realizar un trabajo profundamente humana y delicada, artísticamente contenida y sugerente.

 “La pequeña Venecia (Shun Li y el poeta)”: Ríos de poesía y soledad

Con una fotografía fría y generadora de ambientes intimistas y tristes, con abundancia de símbolos y detalles que intentan trascender la realidad, con una cuidada planificación y con interpretaciones -excelentes Zhao Tao y Rade Serbedzija- nada afectadas que se apoyan en miradas y silencios más que en palabras o acciones, la cinta se hace intencionadamente lenta y morosa… en su búsqueda de reflexión y contemplación. Todo se sugiere más que se cuenta, y el tiempo parece suspendido o silenciado en el interior de los personajes, para una historia mínima que termina dando la razón a esa desigual suerte que tiene las aguas de los ríos, cuando unas alcanzan el mar y otras se estancan en su recorrido. Así son las vidas de Li y del poeta Bepi… y así es su amistad, creadora de vínculos que pueden romperse aparentemente pero que en realidad perduran en la eternidad o en el anonimato (interesante es el personaje de la amiga de Li, que merecía un mayor desarrollo).

“La pequeña Venecia (Shun Li y el poeta)”: Ríos de poesía y soledad

La presencia y buen recibimiento en festivales de prestigio avalan la propuesta de Segre, más recomendable para espectadores con alma de poeta y gusto por lo íntimo y sutil que para aquellos que buscan el entretenimiento fácil y placentero en la sala. En cualquier caso, el valor del drama va más allá de la historia de mafias chinas y madres sacrificadas que tratan de recuperar a su hijo… para ahondar en la soledad y mezquindad de la condición humana, y en la necesidad de un afecto que conviene descubrir antes de llegar al mar.

Calificación: 6/10

Imagen de previsualización de YouTube

En las imágenes. Fotogramas de “La pequeña Venecia (Shun Li y el poeta)”, película distribuida en España por Festival Films © 2011 Jolefilm, Aeternam Films, Rai Cinema, Arte France y Eurimages. Todos los derechos reservados.

  • “La grandeza de vivir”: El dolor de la pérdida y el bálsamo de la amistad
  • “The Visitor”: Recuperando el ritmo de la vida
  • “Ice Age 4: La formación de los continentes”: Solidaridad resquebrajada
  • “Las chicas de la 6ª planta”: La Roja conquista París
  • “Almanya: Bienvenido a Alemania”: Orgullo turco en el mapa alemán

Publicado el 1 noviembre, 2012 | Categoría: 6/10, Año 2012, Críticas, Drama, Francia, Italia

Etiquetas: amistad, Andrea Segre, familia, inmigración, La pequeña Venecia (Shun Li y el poeta), Rade Serbedzija, soledad, Zhao Tao


Volver a la Portada de Logo Paperblog