Revista América Latina
El Papa Francisco volvió a cargar este fin de semana en el Vaticano contra la corrupción, a la que consideró un fenómeno mundial que está desacreditando la política.Francisco viene insistiendo desde que asumió su pontificado con sus criticas a la corrupción a partir de una frase que usa como latiguillo: "Pedro era pecador, pero no corrupto". "Es difícil mantenerse honesto en política. A veces es como si algunas personas estuvieran fagocitados por un fenómeno endémico, a diferentes niveles, transversal", consideró el Papa.Agregó que "el problema de hoy es que la política está desacreditada, devastada por la corrupción, el fenómeno de los sobornos".“La corrupción es, por desgracia, un fenómeno mundial. Hay incluso jefes de Estado que se encuentran en la cárcel por ello", lamentó el Papa.Para Francisco, "vivimos un cambio de época" que "alimenta la decadencia moral, no solo en política, sino también en la esfera financiera o social".