La prisión de los espejos.- Rafael Martín Masot

¡¡Buenos días!!
¿Qué tal el fin de semana? Hoy para mi es el primer día libre porque nos hemos trasladado de oficina y hemos estado con la mudanza esta semana...buff un cansancio existencial jaajaj Pero bueno ahora en dos días tengo unos cuantos de vacaciones así que no me quejo mucho.

Hoy me paso por aquí para traeros mis impresiones de una novela que he podido leer gracias a Mari Carmen Morante y a la editorial Baile del Sol, a lo suq eles doy las gracias desde aquí. Y ahora al tema ¿qué me habrá parecido el libro en cuestión?Autor.- Rafael Martín MasotEditorial.- Baile del solPáginas.- 231SINOPSIS

¿Cómo reaccionaría una persona normal si, por azares de su profesión, llegase a tener pruebas de una monumental confabulación entre políticos corruptos, tiburones de las finanzas y distinguidos miembros de la más exquisita burguesía de su ciudad? El psicólogo Marc Viadiu puede que no sea una persona normal, pero el descubrimiento de esta trama de poder, sobornos, cohechos y maldad que no se detiene ante nada y es responsable del asesinato de uno de sus pacientes, lo lleva a una arriesgada determinación. Se presenta en la apartada y lujosa mansión de uno de los dirigentes de la perversa, “honorable sociedad” y le expone sus condiciones. Es un pacto que, sabe, “ellos” no van a aceptar. Ambientada en la Barcelona actual, ciudad que se convierte en fabuloso territorio literario merced a la prosa rotunda, precisa y llena de sutileza de Rafael Martín Masot, La prisión de los espejos desentraña con espléndida maestría una intriga compleja y al mismo tiempo colmada de sencillez. Compleja por cuanto lo son aquellos afanes inhumanos del poder, la avaricia y el ansia de supremacía. Sencilla porque, en el fondo, todo se resume en el diabólico juego eterno: ser depredador o víctima; vivir o morir. Escrita con infrecuente brillantez y depurado estilo, la novela evoca en algunos de sus memorables capítulos a maestros como Yukio Mishima o Paul Auster, sensación muy de agradecer en un autor que, desde su radiante juventud, manifiesta un compromiso inequívoco con la literatura es estado puro, el gran arte de narrar sin concesiones a la baratura comercial ni desaliento ante lo difícil de este reto. Es la apuesta, admirable, del escritor más prometedor de su generación. Una generación, todo hay que decirlo, aún no nacida. Rafael Martín Masot (Granada, 1989), prodigiosamente se adelantó con Abulagos (2004) y La luna eclipsada (2006), al surgimiento de las nuevas voces que, acaso, lo acompañarán en el futuro como máximos exponentes de la narrativa española.AUTOR

Martín Masot, Rafael: nació el día 29 de diciembre de 1989 en Granada. Actualmente compagina los estudios de tercer curso de Medicina en la Universidad de dicha ciudad con la creación literaria, aparte de hacer lo necesario para vivir con intensidad historias no escritas e inconfesables. 

A los 14 años publicó su primera novela, Abulagos (Editorial Atrio), con la que pretendió dar una visión completamente diferente, y más cierta, de la vida cotidiana de los jornaleros andaluces durante los años del franquismo que la que ha quedado en la retina de los habitantes de otras tierras durante décadas. Con su segunda novela, La luna eclipsada, publicada por Rocaeditorial (Barcelona, 2006), se adentró , con una narrativa tan tortuosa y compleja como los sentimientos, en el frustrante mundo interior de una mujer relegada de su propia existencia a la sumisión y la monotonía. Su tercera novela es LA PRISIÓN DE LOS ESPEJOS (Tenerife, 2010).
OPINIÓN PERSONAL
La prisión de los espejos es una novela de acción, un thriller trepidante en el que la acción no decae en sus 234 páginas. Cuando decidí que quería participar en esta lectura conjunta, lo primero que me llamó la atención fue la sinopsis de la novela. Aquellos que me sigáis habitualmente sabéis que no suelo leer novelas de este género muy a menudo, de hecho creo que esta es la primera que leo desde hace mucho tiempo, pero me apetecía leer algo sobre confabulaciones, y sobre todo una novela rápida y entretenida....y eso fue lo que precisamente encontré.El protagonista de esta novela en un principio es Marc Viadiu, psicólogo que conoce la existencia de la organización, y lo que ésta lleva a cabo, a través de uno de sus pacientes, y que se embarcará en una juego entre él y la organización, que da pie a la trama de la novela. En este punto hay que resaltar que la mencionada trama y confabulación  de la organización es bastante fantasiosa...y en algún que otro momento he llegado a pensar que no tenía ni pies ni cabeza, pero a medida que iba leyendo me iba metiendo cada vez más y más en la acción...por lo que aunque no me ha parecido muy real el meollo de la cuestión (es que no quiero deciros exactamente cual es ajjaja) me ha entretenido el planteamiento y he disfrutado con la historia.Como os decía, Marc es el protagonista indiscutible de la novela, pero la misma está plagada de personajes que van y vienen a lo largo de sus páginas, y uno en concreto llegará a ser tan importante como el propio Marc, Teresa. ¿Por qué llegará a ser tan importante como él? Por que ella pasará a ser la narradora de la novela a partir de la segunda mitad, mientras que en la primera mitad lo era Marc. Este aspecto me ha llamado bastante la atención, y ha hecho que pueda conocer a esos dos personajes algo más, ya que un aspecto objetable de esta novela es la poca profundización que de los personajes que hay en la misma se hace por parte del autor. Si bien...como os comentaba más arriba la novela tiene un ritmo trepidante y da poco pie la acción a que se nos muestre un poco de la personalidad de los mismos, creo que podría habérseles dado un poco más de profundidad...porque hay algunos que son visto y no visto.Otro aspecto que ha quedado un poco por los pelos, desde mi punto de vista, ha sido el fondo de la misma...la ciudad de Barcelona. Sabéis por mis otras reseñas que una cosa que a mi me gusta mucho es que me describan los lugares donde transcurre la acción. Pues bien, en esta novela no hay mucha descripción, y si bien sabemos que los hechos acaecen en Barcelona porque se menciona en la misma, podría haber transcurrido la novela en cualquier otra ciudad, ya que no se le da protagonismo alguno.En cuanto a la estructura de la novela deciros que la misma se compone de capítulos muy cortos plagados de diálogos, lo cual hace que el ritmo trepidante del que os hablaba al principio de la reseña se vea incrementado.  Este aspecto es sin duda positivo, máxime cuando nos enfrentamos a una novela de acción como lo es La prisión de los espejos. Además...ya os he comentado en otras muchas reseñas que a mi personalmente la estructuración en capítulos cortos me gusta mucho porque facilitan la lectura de una novela. Antes de terminar quería comentaros un aspecto que me ha llamado mucho la atención, y no sólo a mi, sino a los otros participantes de la lectura conjunta...y es que el autor de esta novela tan sólo tenía 21 años cuando la escribió. Ese aspecto hay que tenerlo en cuenta, ya que a pesar de que he destacado algunos aspecto que desde mi punto de vista podrían haberse pulido, es evidente que para ser una novela escrita por una persona tan joven no está nada mal, y estoy segura de que con los años...y al seguir escribiendo este chico nos va traer muy buenas novelas en un futuro.En conclusión, el que se adentre en las páginas de La prisión de los espejos se va a encontrar una novela trepidante, de una acción constante y que volará entre sus manos en apenas un par de días. Si bien creo que se podría haber profundizado en la ambientación y en los personajes, la novela me ha entretenido, y estoy segura de que os pasará igual.¡¡Muchos besos y hasta mañana!!