El partido correspondiente a las semifinales entre Portugal y España, concentró tensión en todos los metros cuadrados del estadio Donbass Arena (Ucrania). Las continuas protestas del cuerpo técnico y suplentes portugueses ”encendieron” al banquillo español y la respuesta del defensa luso Coentrao dio que hablar. Pepe Reina, portero suplente de la selección junto a Víctor Valdés, salió como un resorte, pero sólo el árbitro turco Cakir calmó al lateral del Real Madrid con una tarjeta amarilla.
Mirá el gesto: