En el último decenio han aparecido gran cantidad de trabajos relacionados con la red. Trabajos impensables hace quince o veinte años. Además de estos trabajos directamente relacionados con Internet, la red se convierte en el escaparate en el que profesionales pre-digitales pueden encontrar un nicho laboral interesante. A parte de los típicos portales de búsqueda de empleo y de las páginas de recursos humanos de mil y una empresas, podemos encontrar recursos con los que buscar llegar a potenciales contratadores.
Pero siempre es importante el impacto, el ser el primero en ofrecer algo diferente y saber llegar más lejos y causando un gran primera impresión (Ya se sabe que para la primera impresión nunca hay una segunda oportunidad). Recientemente el joven francés Philippe Dubost, ingeniero parisino, decidió ofrecer su fuerza de trabajo en la red a través del portal de ventas Amazon. En su anunció se calificaba como el último del stock al tiempo que animaba a que lo introdujeran en el carrito de la compra por 999.000 dolares. Y parece ser que la idea le ha funcionado, habiendo recibido un buen número de ofertas a cual más interesante. Por demás, si no aparecen ideas originales como la de Debost, siempre nos queda probar con un curriculum fuera de lo convencional alfonsovazquez.comciberantropólogo