Revista Cine
Nos dirigimos a un nuevo paradigma de la sociedad de la escasez. Donde los recursos naturales cada vez más límitados tendrán que ser gestionados por Estados cada vez más totalitarios. Las libertades irán restringiéndose también de un modo paulatino en nombre se la seguridad civil. Los recursos energéticos serán cada vez más caros y difíciles de conseguir para el ciudadano de a pie.
El eco-tecno-fascismo suplantará al Capitalismo como sistema de dominación y reducirá al ser humano de la condición de esclavo más o menos necesario que tenía antes a la condición de esclavo-objeto (cosificado) desechable por su ausencia de valor como productor de mercancías en un futuro próximo.
La élite de poder se apoyará en una minoría de especialistas cualificados que organizarán la estructura social en base a sus intereses economico-políticos para el perfeccionamiento de la dominación en todos los ámbitos de la vida del individuo y la sociedad en general.
La capitalización de la información por los medios de comunicación de masas responderá a nuevas formas de propaganda que convergerán en el ideario de una administración social cada vez más selectiva que dividirá a la sociedad en grupos útiles o inútiles para el sistema.
La formación de los especialistas será clave para el nuevo cambio de paradigma. La sociedad tecnológica impondrá una clase ociosa que irá en aumento debido a los avances producidos por la ciencia y la técnica que la mantendrá en un estado de letargo y parálisis inducido por la industria del entretenimiento y el espectáculo.
La nueva clase ociosa será el producto de la sociedad tecnológica y consumirá las mercancías y bienes destinadas a su mantenimiento. El sistema de dominación ya no se basará tanto en la acumulación sino en la administración de recursos cada vez más escasos. Cabe la posibilidad que ante la falta de recursos se puedan desatar conflictos bélicos de mayor o menor intensidad y pandemias provocadas para reducir la población (en mayor medida) de la clase ociosa. No obstante la población en general llegará al cenit dentro de unos años e irá disminuyendo progresivamente dadas las dificultades de subsistencia y procreación debido a la escasez de recursos vitales para la vida.
La vida sólo estará reservada a los elegidos.