La solidez de Lanús pudo más que las ganas de Boca

Sin dudas se trataba de un partido especial para Guillermo Barros Schelotto. Por su idolatría entre los hinchas xeneizes, y porque el encuentro representaba una oportunidad para dar un salto de calidad para un equipo que arrancó mal el campeonato (dos derrotas seguidas) pero de a poco está levantando. Así lo entendió Lanús, que redondeó una muy buena actuación para derrotar 2-0 a Boca y bajarlo de la cima de la tabla de posiciones del Torneo Inicial 2012, que ahora comanda Newell´s.

Interesante presentación del conjunto granate, que presionó en todos los sectores de la cancha, privilegió el buen trato de la pelota cada vez que pudo y neutralizó el poderoso ataque de los dirigidos por Julio César Falcioni (el más efectivo del torneo junto a Vélez, ambos con 12 goles). Su rendimiento en el partido, tal como lo viene siendo en el torneo, fue de menor a mayor.

 Porque en la primera etapa no lograba imponerse aún y las acciones eran mucho más parejas. Incluso, la chance de gol más clara en los primeros minutos la tuvo el visitante, con un zurdazo de Santiago Silva que logró despejar Agustín Marchesín, uno de los responsables de que su equipo tenga la valla menos vencida (4 goles, no le marcan desde la quinta fecha y nadie logró anotarle dos veces).

La férrea marca de la defensa de Lanús anuló a Santiago Silva

 Hasta que a los 32 minutos, en una de las buenas combinaciones colectivas de los del Sur, Guido Pizarro cedió para Víctor Ayala, quien vio bloqueado su remate. La pelota se elevó y parecía sencilla para Oscar Ustari, quien sin embargo no la pudo controlar. Rolando Schiavi salvó sobre la línea pero nadie pudo contener el posterior zurdazo de Mario Regueiro que se convirtió en el 1-0.

 En el complemento se vio lo mejor de Lanús. La asfixiante presión comandada desde el centro del campo por el binomio Pizarro-Fritzler dejó acéfalo de ideas a su rival, que empujaba con ganas y amenazaba con el poderío de sus delanteros, pero apenas lograba aproximarse por medio de alguna pelota parada. Del otro lado, las ocasiones comenzaban a sucederse, y si el local hubiera estado más fino podría haber ampliado la ventaja y tranquilizar a sus hinchas.

El sacrificio de Regueiro, autor del primer gol, para perseguir a Albín

La cuota de suspenso la puso la expulsión de Regueiro a 8 minutos del final. El uruguayo, símbolo del sacrificio que exige Barros Schelotto, bajó varias veces a perseguir a Emiliano Albín y Diego Rivero, fue amonestado por una falta a cada uno de ellos y debió dejar la cancha. Lejos de refugiarse en su área, el local siguió presionando y provocando pérdidas de balón a su oponente. En una de esas recuperaciones, Diego Valeri abrió para Maxi Velázquez, quien devolvió inteligentemente para el talentoso volante, quien a su vez se encargó de definir con suavidad para poner el 2-0.

 Así se fue el juego, que marcó la primera derrota para Boca desde aquella que le propinara Quilmes en la jornada inicial y le privó la chance de recuperar la punta que le habían arrebatado primero Vélez y luego Newell´s. Lanús, por su parte, se ubica expectante con 11 puntos (a 7 del líder) y sueña con seguir ganando para prenderse entre los de arriba. Hoy demostró que tiene con qué.