Revista Salud y Bienestar
El tratamiento a base de Ondas de Choque extracorpóreas está diseñado para el tratamiento de patologías crónicas del aparato locomotor.
Es de uso ambulatorio y demuestra una alta efectividad clínica.
Consiste en un complejo sistema de producción de ondas mecánicas que se introducen en el cuerpo a través de un aplicador (de tipo pistola) que se sitúa en la zona patológica.
Su tasa de éxito que permite aliviar e incluso eliminar el dolor entre un 60% y un 85%, evita en gran medida las intervenciones quirúrgicas, siendo un recurso muy importante en el ámbito de la fisioterapia.
Han demostrado ser un método eficaz y no invasivo para el tratamiento de la patología músculo-esquelética localizada incluyendo: epicondilitis, espolón calcáneo y fascitis plantar, trastornos del manguito rotador, puntos gatillo, la variedad de tendinopatías crónicas y muchas otras indicaciones.
Las ondas de choque aceleran el proceso de curación en el cuerpo y estimulan las fuerzas de autocuración del organismo. Mejoran el metabolismo, aumentan la circulación sanguínea y regeneran y curan el tejido dañado.
La mayoría de las patologías requieren tres a cinco sesiones.