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La tragedia del girasol - Benito Olmo

Publicado el 30 mayo 2018 por Entremislibrosyo
La tragedia del girasol - Benito Olmo
Me gustó mucho La maniobra de la tortuga, su ambientación, su trama… pero sobre todo me gustó su protagonista, Manuel Bianquetti. ¡Qué gran personaje! De esos que estás deseando volver a encontrarte. Afortunadamente Benito Olmo no nos hizo esperar demasiado, o será que estos dos años se me han pasado volando, pero os digo desde ya que si la anterior me gustó, ésta me ha encantado. Hoy os hablo de La tragedia del girasol.

Mi opinión


Bianquetti, suspendido de empleo y suelto tras lo acontecido en La maniobra de la tortuga, se dedica a la investigación privada como única alternativa para subsistir. Mientras se ocupa del encargo de localizar a una prostituta le llega una propuesta de una empresa de seguridad a través de un antiguo compañero. Su misión, proteger a un adinerado empresario de visita en la ciudad. Pero lo que aparenta ser un trabajo sencillo termina complicándose más de la cuenta con una serie de asesinatos que indican que en este trabajo se esconde algo mucho más oscuro. Para colmo de males una bellísima mujer, una auténtica mujer fatal, se encuentra en el meollo de la tragedia y no hace nada más que complicar las cosas a nuestro querido Bianquetti.
Un protagonista que sigue creciendo y al que, a pesar de su irreverencia y su constante impertinencia, es imposible que no le cojamos cariño todos aquellos que hemos descubierto el corazón que se oculta tras este hombretón de más de dos metros de altura. Bianquetti es uno de esos personajes que llegan y nos conquistan, creando una cierta dependencia en el lector que no ha terminado aún la última novela de Benito Olmo cuando ya está pensando en la siguiente. Junto a él nos reencontraremos con algunos conocidos de la anterior entrega, pero todo un elenco de nuevos personajes llega para hacer de La tragedia del girasol una novela que te atrapa en las primeras páginas y no te da un respiro hasta que llegas al final. Para ello no necesita de un ritmo vertiginoso, sino que avanzando sin prisa, pero sin pausa, Benito Olmo nos agarra de la mano y nos mete en su novela para que junto con su protagonista vivamos y sintamos en cada una de sus páginas todo lo que vive y siente él.
Junto a este carismático protagonista, que por sí solo podría sostener la novela, realismo y coherencia son las señas de identidad de esta novela policíaca de corte clásico en la que el autor vuelve a hacer gala de su buen hacer a la hora de tratar con mimo y fluidez las relaciones que se establecen entre los distintos personajes y en la que trata con delicadeza y acierto, sin cargar las tintas, temas tan difíciles con la soledad, el miedo y la vida en la calle. Benito Olmo no solo sabe servir a los lectores tramas atrayentes, sino que tiene la capacidad de transmitirnos a través de las palabras todo un cúmulo de sensaciones y emociones que hacen de la lectura una experiencia aún más completa.
De nuevo las calles de Cádiz y otros lugares de la provincia cobran protagonismo para mostrarnos una imagen muy alejada de clichés con playas y carnavales, llevando al lector por escenarios que resultan reconocibles en cualquier ciudad y construyendo así una trama que, además de bien hilvanada, resulta real y verosímil, tocando temas de candente actualidad como el narcotráfico, la corrupción y la prostitución. Y es que La tragedia del girasol es una novela policíaca que Benito Olmo construye con pericia a través de una trama muy bien urdida que el autor cierra tras varios giros narrativos espectaculares, de esos que te dejan con la boca abierta sin necesidad de sacarse ningún conejo de la chistera, conduciendo al lector hasta un desenlace limpio y sin fisuras, con momentos y escenas realmente espectaculares conforme nos acercamos a ese final. Todo ello nos lo sirve el autor con una prosa sencilla, fluida y muy visual, con abundancia de diálogos que destacan por su naturalidad y con las descripciones justas y muy acertadas para situarnos en los escenarios, con una mención especial a las escenas de acción que el lector podrá “ver” mientras lee.
En definitiva, La tragedia del girasol es una magnífica novela policíaca de corte clásico con la que Benito Olmo demuestra que sigue creciendo y madurando como autor y que sin duda ha venido para quedarse en nuestro panorama literario. Si aún no os habéis animado con sus letras hoy debéis llevaros dos recomendaciones, aunque ambas novelas pueden leerse de forma independiente. No puedo terminar la reseña sin hacer mención al adecuado título de la novela cuyo metafórico significado da una vuelta de tuerca a lo leído tras finalizar la lectura.

Ficha técnica



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