En septiembre anunciábamos que la vacuna contra la meningitis B estaría disponible en las farmacias a partir del mes de octubre. Muchos padres que temen las consecuencias de esta enfermedad no querían dejar pasar la oportunidad de vacunar a sus hijos una vez que la vacuna estuviera disponible en las farmacias previa prescripción pediátrica (hay que tener en cuenta que la vacuna tiene un coste que ronda los 115 euros, aunque inicialmente se hablaba de 95 euros).
Pues bien, la afluencia ha sido tal que ahora los padres que acuden a solicitarla se encuentran con que la vacuna contra la meningitis está en lista de espera, en unos dos meses se ha agotado el stock y no hay existencias, por tanto no pueden vacunar a sus hijos, tienen que esperar a que esté disponible nuevamente. La vacuna se inyecta en tres dosis y una de recuerdo, siempre dependiendo de la edad del paciente, por otro lado, no permiten la administración de la primera dosis si no se cuenta con el resto de dosis necesarias.
Aunque de momento la vacuna que se denomina Bexsero no figura en el calendario vacunacional de forma obligatoria y de momento no está prevista su inclusión, la AEP (Asociación Española de Pediatría) recomienda que se suministren las dosis necesarias a través del canal farmacéutico a fin de poder prevenir la enfermedad de forma efectiva, lo que ha provocado que los padres acudan a las farmacias para asegurarlas y por tanto, que se agote rápidamente el stock.
Mucho le ha costado cambiar de opinión al Ministerio a la hora de liberar esta vacuna, además debía haber previsto lo que ocurriría y haber puesto en marcha los mecanismos oportunos para que no se llegara a esta situación, aunque quizá, si hubiera advertido a la empresa que produce las vacunas, no habría podido solucionarse el tema y las razones las conoceréis a continuación.
La empresa responsable de la vacuna asegura que se ha sorprendido con la reacción de la población, pero advierte que el suministro inicial se ha satisfecho tal y como estaba previsto. Comenta que la gran demanda mundial de la vacuna provoca la necesidad de realizar una distribución controlada a través de los distribuidores. En teoría, a mayor número de unidades mayores ganancias, pensaríamos que es raro que no hayan incrementado la producción para satisfacer la demanda.
La razón de que la disponibilidad de la vacuna sea tan limitada es que se tardan unos 9 meses en elaborarla, es un proceso largo y complejo, no se trata de aumentar la producción, no es un tema de voluntad, simplemente que los cultivos requieren su tiempo y los 9 meses son necesarios para la producción. Teniendo en cuenta que hace un par de meses se aprobó la liberación de la vacuna, es de suponer que como mínimo habrá que esperar 7 meses para que se haya aumentado la producción y se pueda satisfacer al 100% la demanda.
Lo que sí se garantiza es el suministro a los hospitales y la disponibilidad de la vacuna para quienes tengan un riesgo considerable para sufrir la infección. Recordemos que aunque la vacuna fue aprobada en el año 2013, se restringió únicamente al uso hospitalario, administrándose en casos puntuales, como por ejemplo en aquellos pacientes que tenían algún problema en el sistema inmunológico, o en el caso de detectarse un brote e intentar proteger el entorno del paciente. Se podría decir que la empresa que elabora la vacuna de la meningitis sigue llevando a cabo en cierto modo las disposiciones que en su momento puso en marcha el Ministerio de Salud.
Algunos padres comentan que las farmacias les han indicado que deberán esperar al menos 4 o 5 meses para que puedan recibir las dosis necesarias para sus hijos, según leemos aquí, el ajuste de la oferta y la demanda no se producirá hasta el segundo semestre del próximo año. Todos estos problemas han sido causados por el Ministerio de Sanidad, si en el año 2013 no hubiera restringido la vacuna al uso hospitalario, muchos niños ya estarían vacunados evitando el riesgo de sufrir la enfermedad y sus consecuencias.
Enlace permanente:
La vacuna contra la meningitis está en lista de espera