Posted:01 Sep 2015 11:01 PM PDT
Pero ¿sirve cualquier ladrillo visto? No empiezan a ser demasiado vistos?
Cuando el ladrillo es original y no digamos ya si se trata de antiguas estructuras abovedadas con sus vigas de acero como esqueleto y sus adoquines rojos fuerte, con restos de cal y pintura de varias épocas, no cabe duda de que hay que recuperar.
O ese ladrillo visto pintado de blanco playero, con muebles de mimbre de estilo californiano, que solía haber en las casas de la costa en los lejanos años 70. Todo un clásico que en España hemos visto en innumerables casas de la costa de Levante y las Costas Brava y Dorada.
Siempre que se pueda hay que recuperar: baldosa hidráulica, ladrillo visto, adoquines, vigas de madera del grosor de un árbol o metálicas que nos recuerdan la revolución industrial. Es una lástima no aprovechar todos esos detalles de otras épocas que personalizan nuestras casas.
Pero lo cierto es que demasiado ladrillo visto de nuevo cuño, moderno, en un interior "corriente", por así decirlo, resulta un poco pegote, un falso rústico. No sólo no resulta atractivo, sino que da la sensación de decorado, es decir, resulta artificial.
Otro tema es tapar con exceso de cuadros y objetos una pared de ladrillo visto bonita. No conviene abigarrala, ya que por sí sóla es decorativa, a no ser que el ladrillo visto no sea auténtico y sólo se busque el efecto, desde mi punto de vista no resulta bien, sigue siendo artificial. Y además, menos es más.
¿Qué os parece el ladrillo visto? ¿Lo tenemos demasiado visto?