Como ya sabéis, Lady Gaga ha sido atacada recientemente por defender los derechos de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales, acusada por utilizar a la comunidad LGTB para vender más discos. Pero da la casualidad de que cada vez que alguien abre la boca para decir este tipo de payasadas es un homófobo.
La semana pasada, la cantante fue también atacada por un grupo de personas a la salida de una discoteca gay en Sydney, donde la cantante montó un espectáculo erótico para los cientos de personas LGTB y simpatizantes allí congregados.
Ataviada con muy poca ropa, Gaga se subió al escenario y se restregó contra los bailarines sin camiseta que pululaban por ahí mientras cantaba sus canciones. En las redes sociales, ya se especula con que esta escena puede ser una respuesta a las declaraciones del periodista ruso que la calificó de ser una “puta”. Y es que no hay mejor defensa que un buen ataque.
Tal y como ya ha hecho en algunos de los países que ha recorrido con su actual gira, esta actuación fue una especie de precalentamiento para su gran concierto en el Sydney’s Town Hall.