Están a favor del derecho de autodeterminación de los sahararuis (Trinidad Jiménez, PSOE) y de los palestinos, dicen, pero con quien mantienen relaciones amistosas es con las potencias ocupantes o invasoras, Marruecos e Israel.
Por si fuera poco la situación esquizofrénica de tener que defender asimetrías en el mismo derecho y principio genérico de libertad, autodeterminacdión y libre adhesión de los pueblos y tener que posicionarse a favor del derecho de autodeterminación de los saharauis, pero en contra del de los kosovares, a favor del de los palestinos pero contra el del de los vascos, a favor del de los tibetanos, pero de los kurdos aún no sabemos qué decimos, la realidad es todavía más gris, liosa y pragmática. Se está a favor de la autodeterminación de los saharauis pero no se pide la retirada inmediata de las tropas ocupantes y la celebración de un referéndum. Muy al contrario, aboga por que lo que ocurra tenga que pasar por “el acuerdo” con Marruecos, por lo que Marruecos quiera conceder. La última es una propuesta marroquí que agrada a España y es una especie de gestión local de Marruecos del Sáhara por medio de una “comunidad autónoma”, al estilo español. O sea, nada de autodeterminación.
Imposible ser del PSOE y no acabar esquizofrénico si se funciona en base a principios. Fácil de llevar si se funciona con el pragmatismo postmoderno que iniciara Felipe González, en el que todo es relativo y que es sintetizado por el genial Groucho Marx : “Tengo estos principios, y si no le gustan… si no le gustan….pues aquí tengo otros”
“Llevarse bien siempre con el que manda“, o “El talante“. Eso que a la Iglesia Católica le ha funcionado para sobrevivir durante 1600 años ¿Por qué no iba a servirle al PSOE?. Da igual qué tipo de régimen tenga enfrente y los crímenes que pesen sobre él, el PSOE siempre tiene a mano un “No importa, hombre” y una sonrisa en la boca. Es el talante eclesiástico del PSOE. Da igual si es un estado étnico-racista como el de Israel, o si ocupa territorios ajenos militarmente o se ríe de la ONU, da igual si es un régimen de jeques donde en vez de Ley hay Corán o Sharía y se latiga y encierra a homosexuales y a mujeres “adúlteras” como Arabia, da igual si es un régimen de partido único donde se ejecutan 3000 personas al año, como China, o si es un estado criminal de guerra como EEUU con miles de muertos, secuestrados ilegales. torturados, mentiras e invasiones militares, o como en este caso un monarca-dictador de un país vecino que también se ríe de la ONU y los Derechos Humanos. Siempre hay un “no pasa nada, colega, ocupémonos de lo que nos importa, la pasta” para ofrecer.
Hoy es el Sahara, territorio y pueblo ninguneado, ocupado y golpeado por Marruecos permanentemente, pero ayer fue Gaza. La única acción contundente que se quiso iniciar contra el régimen sionista y sus más de 2000 asesinados civiles en la operación “plomo fundido“, se saldó con una contra-orden para no investigar que decía más o menos “La Audiencia Nacional se inhibe de inmiscurse y renuncia a juzgar porque considera que Israel, Democracia y Estado de Derecho, está investigándose con rigor e imparcialidad“. Maravilloso. Primero hablan equidistantemente de “las partes“, equiparando al agresor, y al agredido, pero luego sólo se quedan con una parte, la agresora, a la que dan credibilidad y estátus de única fuente válida.
Ahora, España (PSOE) “lamenta” los “incidentes“, y pide a “las partes”, mesura. Hablamos de saharauis en el Sahara que están siendo desalojados de sus precarias instalaciones, por sus ocupantes, y de detenciones masivas, incendio de las escasas tiendas de campañas existentes, y probablemente heridos y muertos. España habla de “las partes”, y “confía” en que se apañen bien entre ellos. ¿Cuáles son “las partes”?. Sólo hay una parte, Marruecos, que es la que actúa, y también la que no actúa en lo que debe. No hay partes que se deban “entender”,sólo hay una parte, Marruecos, y lo que debe es cumplir la legalidad y las resoluciones de la ONU, y no hay “parte saharaui”, porque no hay institución saharahui alguna vigente.
España llama a “las partes” al diálogo (Y van 35 años). Comienza con las equidistancias onerosas, y dice que no puede “juzgar” ni “condenar”, porque no tiene “datos fiables” (Trinidad Jiménez, y Rubalcaba, PSOE). Y no tiene datos fiables porque “la parte”: Marruecos, ha expulsado a todos los periodistas, informadores y observadores internacionales de la zona que pretendía atacar, no porque alguna casualidad haya producido que no hubiera “fuentes fiables” en la zona. Lamentable la falta de datos como la que se produce en el interior de las comisarías españolas en cada caso de denuncia de torturas. Hay falta de datos, no hay cámaras ni testigos, pero esa falta de datos tiene responsables, porque es buscada, producida. Al parecer no tiene nada que ver que sea el propio partido que gestiona las comisarías el que se niega a instalar cámaras o poner testigos y procurar la “falta de medios de dato”, o que sea Marruecos el que veta, expulsa, a priori, durante y a posteriori cualquier medio de obtención de datos y pruebas, cualquier testigo ajeno a él mismo y prohiba la toma y difusión de imágenes y el acceso.
El último insulto a la inteligencia lo puso ayer Trinidad Jiménez, dice que no puede opinar, porque no tiene datos, y que está esperando datos, y cuando le preguntan qué datos (Pedro J Ramírez), dice que espera el resultado de las investigaciones que Marruecos se está haciendo sobre sus propios crímenes y actuaciones. Maravilloso. Rubalcaba dice lo mismo, Marruecos es un país amigo que le ha dado su palabra de investigar, y confía en él. Un “país amigo” que lleva 35 años riéndose de la ONU, colonizando ilegalmente un territorio, expulsando nativos, pero “amigo”. No es extraño, Rubalcaba y España es el mismo que también pide que se le deje a España investigarse a sí misma en los casos de las torturas y denuncias de vulneraciones de derechos que ella comete. Comprensible.
Ramón Jáuregui dijo en una frase la esencia de la postura española, justificando la expulsión y veto de entrada a los periodistas en la zona atacada “No se puede obviar que la admisión en territorio..(¿nacional?),forma parte del núcleo duro de la soberanía de un país“. Frase antológica con la cual, nos dijo dos cosas:
1- Que para él, Sahara es territorio marroquí, y ejerce legítimamente la soberanía sobre la zona.
2- Que cualquier país puede vetar el acceso de observadores internacionales y testigos en zonas de conflicto o en procesos electorales o en cualquier asunto, y que no hay legalidad internacional que vincule a un país sobre las personas que habitan en el territorio que controla.
Este es el PSOE de “siempre con el que manda” y cuya inspiración es la Iglesia Católica, que siempre ha actuado igual sea cual sea el régimen con el que haya de simbiotizarse. Y no es extraña esa comprensión e infinita generosidad y perdón con los regímenes criminales y tramposos, ¿No perdona diligentemente la Iglesia a sus pederastas y el PSOE tambiéen perdona a sus terroristas de estado ex-presidentes de gobierno e indulta a los pobres policías torturadores que cayeron en pecado? ¿Cómo no iban a perdonar a otros si se perdonan a ellos mismos?
Este es el PSOE de “con quien manda”. Luego está el PSOE de “Digo en teoría esto, pero hago lo contrario”, y en eso también tiene como maestro el modus operandi de la Iglesia Católica. Pero esa es otra historia que no puede ser contada aquí.