Aunque no tan eficientes como los diodos emisores de luz convencionales (LEDs), los diodos orgánicos emisores de luz (OLEDs) cuentan con una serie de ventajas, entre las que figura el ser aplicables sobre superficies flexibles, de modo que sea factible obtener lámparas o pantallas de televisión que se puedan enrollar y guardar en el bolsillo.

