Las 5 claves para mejorar la alimentación en el embarazo

Todas las mujeres tenemos una cosa muy clara. Sabemos que durante las 40 semanas que durará el embarazo. Debemos comportarnos y adoptar un modelo de vida, que ayude sobre todo a la salud nuestra. Y por consiguiente repercutirá directamente en la futura salud y correcto desarrollo de nuestro bebé. En nuestra web, hemos hablado en numerosas ocasiones de las dietas y los menús que debemos tener presentes cuando nos quedamos embarazadas. Al fin y al cabo, somos lo que comemos. Y nos damos cuenta que los buenos hábitos alimenticios que tenían nuestros padres, se han ido perdiendo. Todo gracias a las nuevas comidas procesadas, a la falta de tiempo para preparar una buena comida, lo sabrosas que son la comida rápida y adictiva. Hoy queremos daros unos consejos rápidos, con los que podréis mejorar vuestra salud alimentaria, la cual repercute directamente en nuestra energía y al estar embarazadas, en nuestros bebés. Vamos a aprender como hacer una buena dieta durante nuestro embarazo.

Alimentación y embarazo.

Como hemos dicho, la alimentación es parte fundamental en nuestra vida. Y nos afecta directamente a nuestra calidad de vida. Aunque muchas veces no lo pensemos. Tan solo tenemos que pararnos a mirar las etiquetas (y conseguir descifrarlas) de los alimentos que estamos tomando a diario. Y nos llevaremos más que una sorpresa de lo que estamos tomando y en que cantidades. Un claro ejemplo, que siempre pongo, es el azúcar. El cual, está presente en prácticamente todos los alimentos manufacturados que tomamos. Y la cantidad no es pequeña. Algo que no nos avisan. Lo que supone que solo con las comidas normales que hacemos. Aunque no sean grasientas, aunque no pensemos que puedan ser malas. Ya estamos tomando con creces la cantidad de azúcar recomendada para toda una semana. Pero, al igual que con el azúcar, lo mismo con otras sustancias.

Una prueba, la tenemos solo con mirar las estadísticas de impacto de cáncer en el mundo. Veremos como en los países menos “desarrollados”. El impacto es mucho menor que en países como Estados Unidos, España, Francia, Reino Unido… Y los especialistas no se cansan de decirnos que el mayor responsable del cáncer, es la alimentación que tomamos. Evidentemente cuando hablamos del cáncer de pulmón o de garganta, el tabaco tiene muchísimo que decir. Pero aun así, la alimentación también será clave en este tipo de cáncer. Pero, nuestros gobiernos, siguen permitiendo que se nos vendan comidas con sustancias adictivas como es el glutamato (presente en la mayoría de los alimentos de las grandes cadenas de comida rápida.) U otro ejemplo es la Coca Cola light, la cual posee aspartamo (lo pone en la etiqueta), pero que sabemos de esta sustancia. Voy a dejar, que seas tu, quien investigue y sepa a lo que se enfrenta.

Por otro lado, nos topamos con las hormonas y medicamentos que se les da a los animales para engordar, para que no tengan enfermedades. Que nosotros tomaremos a través de sus carnes.

Y las verduras, frutas… de hoy en día,  no se libran. Con gran cantidad de pesticidas a base de petroleo y otras sustancias altamente nocivas. Por poner un ejemplo.

Siento ser tan alarmista. Ya que según acabas de leer, seguro que dirás. Y que puedo comer, si todo es malo. Por suerte, nuestro cuerpo es muy sabio. Y es capaz de eliminar gran parte de las toxinas que ingerimos. Es por ello, que debemos tener una dieta equilibrada. Y no centrarnos en una cosa concreta. y desde luego evitar los excesos. Mirar las etiquetas. Pero, ahora vamos a ver una serie de consejos que podemos aplicar cuando estamos elaborando la dieta durante el embarazo. De esta forma conseguiremos contrarrestar los efectos de unos y otros alimentos.

Los 5 consejos.

1. Debemos crear una dieta o menú pensando en todo un mes del embarazo. Si lo tenemos organizado para todos los días. Siempre nos resultará mucho más fácil el seguirlo durante todo el embarazo. El día a día es cansado y cuando llegamos a casa para hacernos la comida. Siempre tendemos a hacer lo que más cómodo nos resulta, lógicamente. Por eso, si nos hemos organizado. Cuando lleguemos de trabajar, no tendremos que pensar y lo haremos según tenemos estipulado en nuestra dieta.
2. A la hora de comprar los alimentos, debemos fijarnos en las etiquetas. No pienses que eres tonta por que no entiendes las etiquetas de los alimentos. Es que los fabricantes han luchado mucho para no aprobar la etiqueta por semáforos. Una forma muy fácil de entender que tiene y que no tiene ese producto. Y a cambio, nos ponen una compleja información, que aunque podamos entenderla. Nos va a costar mucha ayuda y una calculadora para saber si nos es buena o no. Además, puedes informarte sobre el etiquetado semáforo y apoyarlo para que se apruebe en un futuro en Europa.
3. Las frutas y las verduras son fundamentales en nuestra alimentación. Y mucho más cuando estamos embarazadas. Seguro que conoces a alguien que está en alguna cooperativa que nos puede proporcionar este tipo de alimentos. Con muchos menos pesticidas de los que encontraremos en los grandes cultivos que trabajan como cadenas.
4. El azúcar debe tomarse en proporciones bajas. Y con los alimentos que tomamos a diario, ya tenemos más que la dosis necesaria. Aunque no queramos. Solo tenemos que ver las estadísticas de diabetes en los países “desarrollados”. Como ha crecido sin control. Y sigue creciendo.
5. Seguro que has oído en muchos sitios que debemos beber por lo menos 2 litros de agua al día. Es cierto que como somos casi todo agua. Necesitamos grandes cantidades de agua. Unos 2 litros diarios. Dependiendo del ejercicio que hagamos, del calor que haga… Aunque lo que nunca nos dicen, es que cuando comemos cualquier comida, ya tiene agua en ella. Si comemos fruta, ya estamos tomando grandes cantidades de agua. Y si tomamos agua en exceso, podemos eliminar con ella, muchos de los nutrientes que hemos ingerido. Con lo que debemos beber agua, según nos pida el cuerpo. Los zumos, son una buena forma de ingerir los líquidos necesarios.