Esta expresión tan serrana expresa que las aves ya construyeron nido y están incubando. En los primeros días de mayo el comportamiento de los animales cambia. Los topos excavan y amplían su topera, el corzo macho se deja ver, ya no oye al picapino taladrar troncos, …. A la perdiz roja se la ve en pareja, cercana a cascos urbanos y/o a caminos transitados, menos asustadizas (no levantan el vuelo al menor ruido), se dejan fotografiar en su medio natural y desde diferentes perspectivas. Una auténtica gozada.


Así se manifiestan en Puebla de Valles y pueblos vecinos. Porque has de saber que este tiempo en la Sierra Norte de Guadalajara es ideal para rutas cuyo único objetivo sea sentirse integrado en la naturaleza.
Lar-ami
