Las comidas infantiles deben tener más colorido

Un nuevo estudio desarrollado por investigadores estadounidenses de la Universidad de Cornell ha determinado que las comidas infantiles deben tener más colorido y un diseño más atractivo, diferenciándose de la comida de los adultos. Según el estudio, son seis los colores que captan especialmente la atención de los niños, por el contrario, los adultos se sienten atraídos sólo por tres colores.

Las comidas infantiles deben tener más colorido y ser más atractivas, pero esto ya lo sabíamos, de hecho, algunos países como Japón ponen en práctica unos métodos originales para hacer que los niños disfruten de comidas saludables en su almuerzo, de ello hablábamos en el post El almuerzo de un niño japonés.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores realizaron un estudio con 23 niños y 46 adultos a los que les mostraron diversas fotografías de comida con diferentes variaciones, número de ingredientes y presentación, variedad de colores, etc. Se concluyó que lo que resulta llamativo para los niños, no lo es para los adultos, algo que delata que es necesario realizar los cambios oportunos para que las comidas cuyos ingredientes son muy saludables pero poco atractivos, logren conquistar a los pequeños. Se podría decir que los niños comen con los ojos ante las conclusiones ofrecidas en este estudio.

En esta investigación también se demuestra que la presentación de los platos juega un papel muy importante a la hora de conquistar el paladar de los niños, algo que se puede ratificar viendo el vídeo que aparece en el post El almuerzo de un niño japonés. Esto requiere mayor dedicación en la cocina, pero merece la pena ya que se logrará que buena parte de los niños disfruten con comidas que habitualmente rechazan.

Los investigadores indican que todos los aspectos son importantes, se han realizado varias investigaciones relativas a las preferencias alimentarias de los niños centrándose en el sabor o el olor, pero hay que tener en cuenta el tamaño de la ración, su presentación y el aspecto visual llamativo y atractivo, es uno de los caminos para conseguir introducir nuevos alimentos, variar y mejorar la dieta de los niños.

Podéis conocer más detalles del estudio a través del artículo publicado en la revista American journal Acta Paediatrica.

Foto | Leonid Mamchenkov

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