Las consecuencias negativas por los drásticos recortes en el deporte se notarán pronto

La nueva rebaja del 34% en las subvenciones que las federaciones reciben del CSD y la reducción de las ayudas de las Comunidades disminuirán el número de competiciones y la calidad de los deportistas

Fuente: cadenaser.com

Aunque el deporte es la única actividad internacional que está suministrando alegrías a la machacada ciudadanía de este país, no tiene pinta de que las buenas noticias se mantengan en el tiempo en este sector hasta ahora privilegiado. Como no podía ser de otra manera, las profunda crisis económica que ahoga a España ha chocado de frente con esta actividad y los recortes se están extendiendo sin remisión por todos los ámbitos del deporte español. La puntilla la ha dado el Consejo Superior de Deportes (CSD), que ha anunciado que las subvenciones que las 63 federaciones nacionales van a recibir este año se reducen un 34% de media. Es decir, en el 2013 van a disponer de un tercio menos de ingresos que un año antes.Y además, este fuerte decrecimiento se suma al que ya sufrieron los últimos años. Según un estudio realizado por el diariogol.com (pincha aquí para verlo), desde el inicio de la crisis en el 2008 la partida presupuestaria estatal destinada al deporte ha menguado el 55,6%. Así, este año las federaciones se repartirán 34 millones de euros, 43 menos que hace cinco temporadas.
Este recorte no afectará a todas las federaciones por igual, pues la disminución dependerá de los resultados obtenidos el año pasado, de la eficacia en la gestión económica, de la situación patrimonial y del grado de cumplimiento presupuestario. Así, mientras que la Federación de Atletismo recibe un 44% menos de subvenciones que en el 2012, la de Taekwondo, que obtuvo tres medallas en los Juegos Olímpicos de Londres, percibirá un 12,8% menos que el año pasado. De igual forma, la de Natación, que sumó cinco medallas en la capital británica, sufrirá una reducción del 23%, mientras que la de Kárate se quedará en el 8,9%, ambas por debajo de la media.Y por mucho que ajusten en gastos superfluos, las consecuencias se van a ir notando en los próximos campeonatos continentales y mundiales. Y serán mucho más visibles en los resultados de los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Y si Madrid logra los del 2020, debería echarse a temblar. 

Fuente: www.bekia.es

Estos drásticos recortes van a agravar, sin duda, la ya nefasta situación económica de las federaciones y, por ende, de los deportistas que las integran. Según un informe económico realizado por los técnicos e inspectores del CSD, 25 de estas federaciones se encuentran en lo que se podría llamar quiebra técnica, pues durante los años de crecimiento económico, el despilfarro ha sido la norma. Según las auditorías practicadas, los datos son demoledores: gran número de presidentes tienen sueldos anuales de 60.000 euros; en algunas hay hasta cuatro personas que reciben anualmente más de 100.000 euros; otras enviaban más directivos que deportistas a las competiciones internacionales; mientras que en otras  los gastos en viajes de primera clase y en comidas pantagruélicas se multiplicaban. Un dispendio en toda regla que ahora ya están pagando los trabajadores de esas federaciones, porque prácticamente todas han tenido o tendrán que presentar algún ERE; las competiciones que organizan, al reducirse el número; o los deportistas, que reciben menos ayudas y participan en menos competiciones. A esto hay que añadir que las comunidades autónomas destinarán este año 230 millones de euros al deportes, cien menos que en el 2012.
Si bien el deporte profesional notará menos estas limitaciones que afectan a las federaciones, ya que los Nadal, Alonso, Gasol, Lorenzo, Pedrosa, Real Madrid y Barcelona no verán afectados ni su ingresos ni sus condiciones de trabajo, el resto de deportes menos profesionalizados van a sufrir duramente las consecuencias negativas en sus carnes. Y ya hay ejemplos que lo atestiguan. De momento, la Federación Española de Gimnasia solo presentará a cuatro gimnastas (dos hombres y dos mujeres), en los próximos Campeonatos de Europa de artística que se disputarán en Moscú del 17 al 21 de abril. Los recortes han afectado a los gastos superfluos y a los imprescindibles. En esta competición, al no disputarse la clasificación por equipos, España reduce su presencia al mínimo necesario para una semipotencia continental. Otro ejemplo: David Cal, único español con cinco medallas olímpicas, realizará su preparación para los Juegos de Brasil en el país sudamericano, porque los recortes le han afectado a su entrenador, Suso Morlán. Ante esta lacra, el técnico ha tenido que aceptar dirigir a los canoístas brasileños, por lo que el palista gallego también se ha tenido que trasladar a Brasil para seguir con su entrenador y optar a la sexta medalla olímpica.

Fuente: lasprovincias.es

Pero hay muchos más casos y con peores consecuencias. Saúl Craviotto, el otro puntal del piraguismo español, oro olímpico en 2008 y plata en 2012, ha visto reducidos sus ingresos del programa ADO y ha dejado de cobrar la ayuda mensual de 500 euros que le daba la Federación. También ha perdido a su fisioterapéuta y se tiene que entrenar en el frío de Asturias porque no hay medios para trasladarse a Sevilla en busca de mejor clima. Todo esto va a tener consecuencia negativas en el rendimiento del deportista. De hecho, un grupo de atletas de élite, ante la reducción del 51% de las subvenciones a la Federación de Atletismo en dos años, han iniciado una serie de protestas y han solicitado que se priorice el apoyo a los deportistas y sus entrenadores. También han reflejado su malestar por el cambio en el criterio de las ayudas del ADO, que han pasado a tener un fijo y un porcentaje importante (35%) por objetivos.  
En la época de vacas gordas, las autoridades políticas y deportivas han invertido mucho en Centros de Alto Rendimiento (CAR), Palacios de Deporte y otras infraestructuras, pero apenas han gastado en forjar una estructura de clubes y escuelas deportivas que sustente el deporte de base y sirvan de cantera a la élite. Esto no resalta ni da votos. Ni siquiera han creado un sistema de financiación específico para esta actividad. De hecho, la manida Ley del mecenazgo, que debería permitir a deportistas y artistas vivir del dinero privado y no del público, se ha quedado en un incumplimiento más del Gobierno, porque costaría recursos al erario público. Sin embargo, todas estas restricciones pueden parecer consecuentes, puesto que si se han producido recortes en sectores tan sensibles como educación, sanidad y servicios sociales, es lógico que también se sufran en otros de menor importancia vital. Pero si en los próximos cursos no se produce un cambio de tendencia en este ansia recortador, la Edad de Oro del deporte español no solo llegará a su fin, sino que se abrirá un período de tinieblas de una profundidad insondable.