Revista Viajes
Cuevas Pak Ou
Una de las visitas más populares en los alrededores de Luang Prabang son las cuevas Pak Ou. Son dos cuevas situadas en un acantilado a la orilla del río Mekong en uno de los parajes más bellos por los que atraviesa este río. Su interior está repleto de Budas de diversos tamaños, la mayoría de las cuales son miniaturas dejadas por los peregrinos.
Las cuevas Pak Ou se visitan en una excursión que suele consistir en una travesía por el río Mekong que una barcaza típica de dos horas de ida y una de vuelta, la visita a las cuevas que suele durar una media hora, y una breve parada en Ban Xang Hay, una aldea típica productora de wisky laosiano.
También es posible llegar por tierra, hay que llegar hasta Ban Pak Ou (a 30 Km de Luang Prabang) y después cruzar el río con una barquita. Sin embargo, lo normal y lo que vale la pena es llegar hasta estas cuevas en barca desde Luang Prabang y disfrutar de los magníficos paisajes que ofrece el trayecto por el río Mekong. De hecho, más que las cuevas Pak Ouen sí, lo realmente interesante de esta excursión es la travesía por el río Mekong.
El ticket cuesta 50.000 kips por persona o 300.000 kips alquilar el barco. Se puede comprar en la mayoría de guesthouse pagando una comisión o directamente en el embarcadero el mismo día. Si te paseas por la tarde por la zona te intentan vender el ticket para el día siguiente por mucho más de lo que cuesta con la milonga de que te vas a quedar sin plaza en el barco y demás.
Las barcazas que hacen esta excursión salen desde un embarcadero que está entre el Museo Nacional y unos metros antes de llegar al templo Wat Xieng Thong. La mayoría salen entre las 8 y las 8:30 de la mañana a medida que se van llenando. Es importante madrugar y no llegar tarde, Pasado este momento es más difícil conseguir que una barca se llene, especialmente en temporada baja.
Yo me decidí a hacer esta excursión el segundo día de mi estancia en Luang Prabang. Llegué a eso de las 9 y ya no había ningún turista esperando. A la media hora llegó una pareja de chinos y estuvimos los tres esperando a que llegase gente para llenar una barcaza. Tuvimos que esperar casi una hora hasta que aparecieron un par de familias francesas para pillar una barca juntos. Tuve suerte porque no parecía que fuese a aparecer nadie más en todo el día.
Desde Luang Prabang hasta las cuevas Pak Ou, el Mekong discurre por una zona muy selvática en la que cada orilla está flanqueada por pequeñas montañas que recuerdan, salvando las distancias, a los montículos que sobresalen en Halong Bay (Vietnam).
El trayecto de ida se hace en dos horas y la vuelta en poco más de una hora. Para mi el tiempo perfecto para disfrutar de los magníficos paisajes y de cómo discurre la vida en el río. Se ve gente pescando con técnicas artesanales, niños jugando y bañándose en el río, mujeres lavando la ropa, laosianos echándose una siestecita, y parece que en temporada seca se puede ver a algunos aldeanos buscando oro en los arenales que se forman en el Mekong.
Una vez el barco llega a las cuevas Pak Ou se paga una pequeña cantidad de 20.000kips para visitarlas. La travesía por el Mekong vale realmente la pena sin embargo las cuevas son algo decepcionantes. No son más que dos pequeñas cuevas repletas de Budas, la gran mayoría de miniatura. Conviene llevarse una linterna ya que una de ellas está completamente a oscuras. También es posible ¨pedir prestada¨ una en la entrada a cambio de un pequeño donativo.
A la vuelta te paran un rato en Ban Xang Hay, una pequeña aldea típicamente laosiana famosa por su producción de wisky local y por sus telares artesanales. No hay gran cosa que ver más allá de las jarras de wisky fermentando con bichos en su interior, y observar el ritmo tan pausado con el que sus aldeanos viven su vida.